Eduardo Segovia | Bolsamania | 09 abr, 2019 06:00 - Actualizado: 09 abr, 2019
Ana Botín se ha encontrado con un problema inesperado ante la junta de accionistas del Banco Santander del próximo viernes: los fondos activistas quieren que se corte una cabeza por el fiasco del fichaje de Andrea Orcel como consejero delegado. Y esa cabeza es la del presidente de la comisión de nombramientos y vicepresidente del banco, Bruce Carnegie-Brown, como máximo responsable teórico de los fichajes. Según fuentes conocedoras de la situación, la presidenta está dispuesta a dejarle caer para no sufrir la ira de los accionistas, pese a que la operación de Orcel fue idea exclusivamente suya.