Eduardo Segovia | Bolsamania | 10 jul, 2019 06:00
Por si algo faltaba a los gravísimos problemas judiciales del BBVA por el caso Villarejo, ahora reaparece Luis Pineda, presidente de Ausbanc, para convertir todo esto en un sainete. Es comprensible: se enfrenta a una petición de 118 años de cárcel, así que es lógico que embarre el campo con una querella contra BBVA y el excomisario. Lo que nadie entiende es la respuesta inmediata del banco: retirar la acusación de extorsión contra su enemigo íntimo. Con todo esto, la reputación de la entidad está cada vez más enfangada en vísperas de la crucial declaración en la Audiencia Nacional de su exconsejero delegado Ángel Cano.