Noemí Jansana | Bolsamania | 29 ago, 2018 06:00 - Actualizado: 29 ago, 2018
La carambola del Ejecutivo de Pedro Sánchez y Podemos para eliminar la palanca del Senado sobre los presupuestos tiene daños colaterales en las relaciones con la Generalitat. Y no son ‘pecata minuta’. La aritmética parlamentaria de la reforma de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad, pactada entre ambas formaciones, requiere el voto favorable de los mismos grupos del Congreso que respaldaron la moción de censura socialista, entre ellos, los independentistas. Un autogol en toda regla del presidente del Gobierno que se ve obligado a descartar un nuevo 155 en la región, por ahora.