Eduardo Segovia | Bolsamania | 21 ago, 2018 06:00
El fin del rescate de Grecia ha sido recibido con alegría por los políticos de toda Europa como si hubieran quedado atrás definitivamente las crisis de deuda y el euro estuviera blindado. Nada más lejos de la realidad. El crecimiento del euroescepticismo y del populismo amenazan con nuevas políticas como las que llevaron a la crisis de deuda, sin olvidar el riesgo de nuevos terremotos bancarios, con un sistema de rescate insuficiente. El mayor riesgo está en Italia, pero cuidado con España.