Noemí Jansana | Bolsamania | 20 oct, 2018 06:00
La conversión de los valores tradicionales en tokens criptográficos que se operen en bolsas paralelas a los parqués que mueven billones de dólares en todo el mundo es el gran objetivo de la criptoeconomía a dos años vista. La renta variable vivirá un proceso de digitalización en mercados primarios y secundarios entre 2019 y 2021, según los expertos, que abrirá las puertas a un dinero institucional que no se acaba de decidir a entrar en los activos de cifrado.