Economía/Motor.- Fiat disminuirá su producción de coches compactos 'Made in Italy' en favor de modelos SUV, según T&E
MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La marca italiana Fiat está en un proceso de disminuir su producción de coches compactos fabricados en Italia ('Made in Italy') en favor de la producción de modelos tipo SUV, siguiendo la tendencia de la industria automovilística europea, según un informe de la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E).
En su análisis, la organización señala que la marca nacida en Turín hace más de un siglo avanza su producción "rápidamente" hacia segmentos superiores y registra un aumento de los volúmenes de modelos tipo SUV. Al mismo tiempo, la compañía sigue una senda de deslocalización de sus volúmenes hacia Serbia, Polonia y Turquía, mientras que el ritmo de electrificación de su flota "no coincide con los compromisos de descarbonización" comunicados por su grupo matriz, Stellantis.
Así, según este análisis de T&E, de las previsiones de GlobalData se desprenden tres tendencias evolutivas que caracterizarán la producción de Fiat en los próximos años: deslocalización, lento proceso de electrificación y aumento del tamaño de los automóviles.
En concreto, con este proceso de deslocalización solo el 22% de la producción de automóviles se quedaría en Italia. Mientras que en 2022, aproximadamente la mitad (48%) de los 510.000 Fiats producidos se ensamblaron en el país transalpino, con el resto distribuido entre Turquía (26%), Polonia (25%) y Serbia (1%), se perfila una tendencia adicional hacia la deslocalización en el horizonte, explica T&E.
Las proyecciones de GlobalData sugieren que la mayoría de los vehículos Fiat producidos en 2030 serían ensamblados en Serbia (34%). A Turquía, que recibiría el 25%, le seguiría Italia (22%), donde solo se produciría el modelo eléctrico Fiat 500.
El resto de la producción se distribuiría entre Polonia (15%) y Argelia (4%). La confirmación de la producción del modelo Panda en su versión eléctrica en Kragujevac, Serbia, es un claro ejemplo de la estrategia en curso.
MENOS DEL 12% DE SU PRODUCCIÓN ES ELÉCTRICA
El otro aspecto que apunta el estudio es la lenta electrificación de su gama, ya que menos del 12% de la producción total de la marca en la Unión Europea y países vecinos (580.000 vehículos) en 2023, fueron vehículos 100% eléctricos de batería (BEV).
Las previsiones de los países analizados indican que, en 2030, sólo la mitad (53%) de la producción podría ser eléctrica. Una situación ligeramente diferente para Italia que, en este escenario, sería el único país que, en esa fecha, alcanzaría la electrificación total de los volúmenes de la marca, aunque confiando en la producción de un solo modelo, el Fiat 500 eléctrico (que el año pasado era el único BEV ofrecido por FIAT en el mercado).
La producción de eléctricos representó el año pasado el 18% de las ventas de la marca Stellantis en Europa, mientras que en Italia la participación se contuvo en el 2,9%.
AUMENTO DEL TAMAÑO DE LOS VEHÍCULOS
La última tendencia que anota el análisis que hace T&E de los datos de proyección de GlobalData muestran una estrategia de producción basada cada vez menos en modelos pequeños pertenecientes a los segmentos A y B.
Si en 2022 dos de cada tres coches Fiat (66%) eran coches pequeños pertenecientes al segmento A, las previsiones indican una inversión de tendencia en la producción: los vehículos del segmento A caerán hasta el 43% de la producción total, a favor del crecimiento de los vehículos del segmento B (que pasarían del 8% al 32%; y se trataría únicamente de modelos SUV), mientras que en el segmento C --que mantendría la misma cuota de producción (26%)--, el porcentaje de SUV pasaría del 0 al 10%.
Por tanto, la tendencia a la "SUVización", como la llama la organización, "parece marcada". En 2023, los SUV representaron apenas el 12% de la producción de Fiat , muy por debajo de las ventas registradas para ese tipo de vehículos en el mercado italiano (56%) en el mismo año.
Los datos proyectados estiman que, para el 2030, el 42% de la producción automotriz europea de la compañía estaría compuesta por SUV (un aumento de aproximadamente 3-4 veces en comparación con el 2023), lo que llevaría al mercado modelos como el 600 (B-SUV) o el Multipla (C-SUV).
La tendencia a producir vehículos de segmentos "superiores", asociada con la creciente predominancia del "paradigma SUV" para el automóvil (para el grupo Stellantis, el 77% de la producción italiana para el 2030 sería de SUV), corresponde a una estrategia de maximización de beneficios, como ya ha destacado un análisis de T&E, que es transversal a todos los fabricantes europeos.
EMPAÑAR SU IDENTIDAD
Finalmente, T&E, indica que Fiat, al evolucionar hacia vehículos de mayor tamaño "empañaría su identidad" en un momento en el que la falta de oferta del sector automovilístico europeo en los segmentos de coches pequeños (A y B) es evidente, especialmente para la producción de coches eléctricos (BEV). Este es un vacío que muchos analistas creen que será llenado con la producción china.
Sin embargo, el reciente lanzamiento del Renault 5 eléctrico (fabricado en Francia con una batería producida en Europa) demuestra que existe un camino hacia "el pequeño coche europeo" sin emisiones. Pero sigue siendo necesario una dirección industrial clara y políticas industriales de apoyo adecuadas.
Por tanto, la organización recomienda que el Gobierno italiano adopte un sistema de incentivos exclusivo para los vehículos de cero emisiones y una nueva fiscalidad sobre los automóviles --y especialmente sobre los de empresa-- basada (como en casi todas partes de Europa) en parámetros de emisiones
Además, señala que Italia debería promover y apoyar toda la cadena de valor de la movilidad eléctrica, para invertir en todo el ciclo de las baterías, desde el refinado y el procesamiento de las materias primas hasta su recuperación. "La creación de un ecosistema favorable a la transición eléctrica puede ser un factor decisivo para atraer nuevas inversiones".
T&E también pide a Stellantis que manifieste claramente su apoyo a la eliminación de la endotermia hasta 2035, "recientemente empañada por declaraciones repetidas y vagas que presagian desaceleraciones o replanteamientos sobre la descarbonización de la producción del grupo".