Los centros de datos mejoran su eficiencia energética y su consumo aumentó solo un 6% desde 2010 hasta 2018
MADRID, 28 (Portaltic/EP)
Los centros de datos que soportan el funcionamiento de los servicios digitales han aumentado su consumo energético en los últimos años pero menos de lo esperado, concretamente en un 6 por ciento desde 2010 hasta 2018, a pesar de que su potencia de procesamiento se ha multiplicado por seis.
Estas instalaciones han mejorado sustancialmente su eficiencia energética en los últimos años debido a medidas como el uso de la computación en la nube, como ha concluido un estudio conjunto de las universidades del Noroeste, California y Berkeley (todas de Estados Unidos).
La investigación, que se ha publicado este viernes en la revista Science y ha recogido The New York Times, muestra que los centros de datos representan alrededor del 1 por ciento del consumo energético mundial, equivalente al consumo de 17 millones de hogares.
Debido que su "demanda ha crecido rápidamente" en los últimos años por parte de la economía digital, las estimaciones previas sobre el consumo energético de los centros de datos predecían que se multiplicaría por tres o más en la próxima década.
Entre los años 2000 y 2005, la energía consumida por los centros de datos efectivamente se duplicó y las previsiones de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos eran que para 2010 este consumo se duplicaría de nuevo.
No obstante, según el estudio estas previsiones eran tan solo "extrapolaciones basadas en indicadores recientes de crecimiento de la demanda de servicios" y pasaban por alto los mecanismos de eficiencia energética que ha ido implantando el sector.
Así, Jonathan Koomey, científico independiente y uno de los autores del informe presentado este viernes, redujo las previsiones y cifró un incremento de consumo del 56 por ciento en 2010 con respecto a los datos de 2005.
Según las conclusiones del estudio actual, de 2010 a 2018 el consumo energético de los centros de datos de todo el mundo apenas aumentó en un 6 por ciento, mientras que su potencia de procesamiento pasó a ser un 550 por ciento mayor, como explica Google en un comunicado.
USO DE LA NUBE
La investigación señala al uso de la computación en la nube como una de las principales causas de este aumentos de eficiencia, algo que "ha cambiado el panorama de forma dramática", señalan.
En el año 2010, el 79 por ciento de la computación en centros de datos tenía lugar en pequeñas instalaciones tradicionales, en su mayoría propiedad de empresas no tecnológicas, como recoge NYT.
En 2018, no obstante, el 89 por ciento de la computación tenía lugar en centros de datos a gran escala, instalaciones generalmente gestionadas por compañías tecnológicas y centradas en la computación en la nube.
Una de estas compañías es Google, que ha conseguido que sus centros de datos proporcionen siete veces más poder de computación con la misma cantidad de energía consumida, según su vicepresidente de infraestructura técnica, Urs Hölzle.
Los centros de datos de la empresa estadounidense son "el doble de eficientes enérgicamente que un centro de datos empresarial típico", según Hölzle, gracias a técnicas como el control de refrigeración a través de Inteligencia Artificial, lo que consigue un ahorro medio del 30 por ciento.