Los aranceles y el espionaje amargan el año a las tecnológicas chinas
Una información publicada este jueves por Bloomberg ha lastrado aún más al sector
Las ‘bigtech’ chinas no estaban viviendo un buen final año, lastradas por la guerra comercial entre su país y Estados Unidos, pero el escándalo de espionaje desvelado este jueves por Bloomberg ha terminado por ensombrecer su panorama.
ZTE, Xiaomi, Tencent y Lenovo cerraron la semana con pérdidas en la bolsa de Hong Kong agravando el mal rendimiento de las tres primeras desde inicio de año y estropeando el de Lenovo, que había logrado esquivar las consecuencias de la guerra comercial.
Bloomberg publicó este jueves una historia propia de un guión de Hollywood, que, por otra parte, ha sido negada por todos los implicados. El ejército chino estaría detrás de una compleja operación de espionaje por medio de microchips incrustados en dispositivos fabricados en el país asiático.
Según la información, sustentada en testimonios de fuentes no identificadas, los dispositivos intervenidos acabaron en Estados Unidos empleados por una treintena de grandes compañías entre las que se cuentan nada menos que Apple y Amazon.
CAÍDAS EN HONG KONG
Aunque el reportaje de Bloomberg no indicaba qué empresas chinas estarían involucradas en la trama, casi todo el sector tecnológico sufrió las consecuencias con importantes caídas durante la sesión del viernes.
El principal damnificado fue Lenovo, que cayó un 15%, seguido por ZTE, con una bajada del 11%, ante el temor de que consumidores y empresas se vuelvan reacios a comprar productos tecnológicos chinos. El gigante de internet chino Tencent, propietario de la popular app de mensajería WeChat, cayó un 1,1% y ya ha perdido un cuarto de su valor en este año. El fabricante de móviles Xiaomi, que salió a bolsa este verano, se dejó un 1,5%.
“Ésto puede ser un golpe mortal para las ambiciones chinas de dar un salto cualitativo en la cadena de valor para 2025 ya que los mercados occidentales probablemente cerrarán de golpe las puertas a compañías como Huawei, ZTE, etc.”, opina el analista de RaboResearch Michael Every.
“Si a ésto le sumamos la imposición de aranceles de un 25% por parte de EEUU y el nuevo acuerdo comercial entre con Canadá y México yo apostaría a que ésto sólo acelerará la salida de China de la cadena de suministros electrónicos”, añade Every.
EL ‘ANNUS HORRIBILIS’ DE LAS TECNOLÓGICAS CHINAS
Antes de que Bloomberg desatara el escándalo de espionaje, el sector tecnológico chino venía padeciendo las consecuencias de la guerra comercial iniciada este año. Las esperanzas generadas durante 2017, que hicieron soñar a algunos con adelantar a corto plazo a Sillicon Valley, se acabaron desvaneciendo ante la escalada de tensión y las subidas arancelarias de este verano.
La primera en caer por el abismo fue ZTE. El proveedor de equipamiento de telecomunicaciones cayó un 40% tras verse obligado a pagar 1.000 millones de dólares a EEUU, después de que el departamento de Comercio de este país hubiera prohibido la venta de componentes a la compañía china dos meses antes.
El debut en bolsa del gigante de los smartphones Xiaomi se vio gravemente perjudicado al producirse en medio de las tensiones comerciales y Tencent marcó su máximo anual en febrero y ha venido en una caída sostenida desde entonces.
Las perspectivas no son muy optimistas para el sector tecnológico chino, con JPMorgan anticipando "una guerra comercial total" entre China y EEUU para 2019. Todo un emblema de las ‘bigtech’ del país asiático, el presidente de Alibaba Jack Ma, fue más allá el mes pasado y predijo que el conflicto se extendería durante al menos dos décadas.