Reforesta destaca el potencial del suelo como gigantesca reserva de carbono y pide favorecer su buena gestión
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
La organización Reforesta ha destacado el potencial del suelo como una "gigantesca" reserva de carbono y coincidiendo con la Cumbre del Clima que se celebra en Katowice (Polonia) insiste en la importancia de favorecer su buena gestión para luchar contra el cambio climático.
Este miércoles, 5 de diciembre, se celebra el Día Mundial del Suelo, y Reforesta recuerda que después de los océanos, el suelo es la principal reserva y sumidero de carbono. Por ello, su uso puede influir en el éxito o el fracaso de la lucha contra el cambio climático.
Los suelos acumulan una cantidad de carbono equivalente a 300 veces las emisiones anuales de gases de efecto invernadero derivadas de la quema de combustibles fósiles, según datos de los científicos Schulze y Freibauer. Se trata de un sumidero de carbono ya que tiene gran capacidad de almacenamiento y puede tener un buen balance entre captura y emisión de carbono, al tiempo que es capaz de retenerlo en el largo plazo. Según datos de la FAO, la capacidad de captura de carbono por parte del suelo se estima en torno a 20.000 millones de toneladas en 25 años.
Sin embargo, el cambio de usos de suelo, al convertir bosques y turberas en tierras de cultivo y pastos supone un 10 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero de origen antrópico. Según la FAO, en 2009, las tierras de cultivo europeas emitieron una media de 0,45 toneladas de CO2 por hectárea.
La conversión de bosques y praderas en tierras de cultivo en regiones templadas y tropicales conlleva una pérdida de carbono orgánico del suelo (COS) de entre un 25 y un 30 por ciento; la conversión de tierras de cultivo a estos otros tipos de uso de la tierra produce un incremento comparable del COS.
Considerando los escenarios de aumento de la temperatura global, los científicos estiman que el aumento en 2ºC en la temperatura para el año 2050, dará lugar a la liberación de 55.000 millones de toneladas, lo que da idea del impacto en la retroalimentación del cambio climático que puede suponer un mal manejo del suelo.
La FAO afirma que, con aproximadamente el 33 por ciento de los suelos del mundo en proceso de degradación, se han producido grandes pérdidas de materia orgánica del suelo. De este modo, Reforesta destaca que estas pérdidas dan una oportunidad de capacidad de reserva de carbono recuperable de los suelos agrícolas y degradados del mundo de entre 21 y 51 gigatoneladas de carbono.
En España, el informe 'Análisis de los procesos de desertificación', realizado por el Gobierno, señala que se espera una disminución generalizada del carbono orgánico del suelo como consecuencia del incremento de temperatura y del aumento de la sequía.
Precisamente, las zona donde se esperan mayores pérdidas son las más húmedas, es decir el norte de España, y para los usos de suelo que tengan mayores contendios de carbono orgánico del suelo, los prados y bosques.
En este contexto, aconseja a los agricultores apostar por las buenas prácticas agrícolas para disminuir la pérdida de carbono orgánico del suelo o incluso aumentarlo como el uso de cubiertas vegetales; el uso de enmiendas orgáncias, aprovechando los propios residuos de las cosechas, incorporando el estiércol; el uso del barbecho, la rotación de cultivos o el mínimo laboreo. Otras de las buenas prácticas son la siembra directa, el cultivo en terrazas en zonas de pendiente, el cultivo siguiendo las curvas de nivel o la agrosilvicultura.
En cuanto a los consumidores, para contribuir a disminuir las emisiones de carbono de la agricultura y la ganadería, Reforesta recomienda consumir productos de temporada, de entornos cercanos, sin aportar grandis insumos de fertilizantes, plásticos. También aconseja buscar cultivos responsables, evitar productos con aceite de palma y fomentar la reforestacion.