Oceana rechaza la nueva regulación de pesca de arrastre por fomentar el "fraude" y "sobreexplotación" del Mediterráneo
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
Oceana rechaza la nueva regulación de pesca de arrastre por fomentar el "fraude" en la potencia de los motores de barcos de arrastre y autorizar las horas de actividad, lo que provoca la "sobreexplotación" del Mediterráneo, según la organización.
Esta entidad, dedicada a la conservación y defensa de los océanos, se refiere al Proyecto de orden ministerial difundido el pasado 14 de noviembre. "El texto pasa por alto el fraude generalizado en la potencia de los motores de barcos de arrastre e incluso autoriza las horas de actividad de esta flota", detalla Oceana.
Además, según la científica marina de Oceana, Pilar Marín, la orden está destinada al "fracaso" porque "en lugar de tomar medidas, el Ministerio se lava las manos".
"El Mediterráneo se encuentra en una situación crítica por una presión pesquera insostenible que ni siquiera respeta las zonas de cría. Especies tan consumidas como la merluza están llegando al límite. El fraude en la potencia de los motores es una práctica estándar, un escándalo permitido que agrava la crisis de sobrepesca de nuestras aguas. Este borrador suena a un lavado de cara ante la UE y está lejos de ser un acto de valentía para afrontar una situación extrema", ha explicado Marín.
No obstante, Oceana ha señalado tres problemas que presenta el texto. El borrador, de acuerdo con la organización, establece los días de pesca sobre los que aplicar una reducción del 10 por ciento del esfuerzo pesquero en 2020 aunque permite incrementar las horas de actividad de las doce horas diarias actuales a quince o 18 al día, durante cinco días a la semana.
Asimismo, Oceana apunta a que el esfuerzo pesquero no refleja la realidad, ya que diferentes publicaciones en determinados puntos del litoral español arrojan un fraude en la potencia de los motores en la práctica totalidad de su flota de arrastre. "El fraude se reafirma en un estudio de la Comisión Europea lanzado el pasado mes de junio. Este porcentaje no se ha tenido en cuenta ni cuando la UE aprobó el plan plurianual, ni durante la redacción de la orden ministerial.
Por último, Oceana propone ampliar los periodos de veda de la merluza de tres o cinco meses a un mínimo de seis para adaptarlos a su ciclo de vida, y establecer vedas para otras especies que también están sobreexplotadas, como salmonetes y gamba blanca.