Lombardi, moderador de la cumbre antipederastia, vería "extraño" que ciertos países no se dieran cuenta de la "gravedad"
ROMA, 13 (EUROPA PRESS)
El padre Federico Lombardi, encargado de moderar la cumbre antipederastia que tendrá lugar del 21 al 24 de febrero en el Vaticano, ha precisado que vería "extraño" que determinados países no se dieran cuenta de "la gravedad" del problema de los abusos.
"Si un obispo de EEUU todavía no se ha dado cuenta de la gravedad del problema, sería muy extraño; pero los que vienen de un país pobre, de un país en una zona de conflicto o donde hay una pequeña comunidad católica, viven una situación muy distinta", ha precisado en un encuentro con la prensa extranjera.
Para Lombardi, el problema de los abusos sexuales a menores por parte de sacerdotes y religiosos es "un test para la capacidad de la Iglesia de dar respuestas y, más en general, para su credibilidad".
También ha asegurado que la Iglesia católica está pagando "un precio altísimo" por haber "escondido el pasado", y ha reconocido que en la Iglesia ha habido y todavía hay "ciertas resistencias" al cambio pero que en este momento "hay una flecha que indica la dirección más justa".
El exdirector de la Oficina de Prensa de la Santa Sede y de Radio Vaticano, ha manifestado asimismo que todavía hay "pasos que dar" en el tema de los sacerdotes que han obrado con negligencia al abordar los casos de pederastia, si bien espera que el encuentro sirva para "animarles a afrontar y prevenir este problema sin miedo".
"Tenemos que tratar con profundidad y sin miedo este tema que yo vivo un poco como un test serio de la capacidad de respuesta de nuestra parte, de la Iglesia y de la sociedad hacia temas graves como la violencia, el abuso, la falta de respeto a la dignidad de los demás", ha subrayado, al tiempo que ha advertido de que si la Iglesia no se empeña "en combatir hasta fondo estos crímines" estará "faltando a su deber".
LA CREDIBILIDAD ESTÁ "EN JUEGO"
"Como hombre del clero, sacerdote y religioso estoy absolutamente convencido de que nuestra credibilidad está en juego en este campo y que solo si somos creíbles recuperaremos la autoridad moral para desempeñar nuestro servicio en la sociedad como educadores y también como motor de ayuda a las personas", ha apuntado.
Lombardi ha aclarado que es necesario afrontar estos graves crímenes "partiendo del origen, buscando en las raíces del problema" pero también "mostrando capacidad de reaccionar para una sanación real".
En este sentido, ha asegurado que no se trata de poner en práctica solo "cuestiones de forma o de procedimiento" sino "un test de la profundidad de la reforma" que refleje "cómo se vive la misión dentro de la Iglesia, con qué coherencia se actúa mostrando compasión por el que sufre y protegiendo la dignidad de los más vulnerables".
Sobre la afirmación del Pontífice acerca de las expectativas del encuentro, Lombardi ha indicado que "es lógico que haya grandes expectativas ante el trabajo de la Iglesia", pero que hay que enmarcarlas en lo que puede producir "un evento que va a durar solo tres días y medio".
"Espero que los obispos vuelvan a casa más informados, sabiendo qué procedimientos deben aplicarse, sabiendo que tienen varios recursos que pueden ayudarles, que la Comisión de Menores puede organizar un equipo de ayuda para solventar un problema concreto en una iglesia local", ha apuntado.
QUE LOS OBISPOS SE REÚNAN ANTES CON VÍCTIMAS
Sobre el funcionamiento y la organización de las sesiones de trabajo, que serán a puerta cerrada y sin periodistas, Lombardi ha revelado que participarán algunas víctimas que contarán en primera persona su historia de abusos. Si bien, ha dejado claro que lo importante es que los obispos se hayan reunido con víctimas antes de llegar a la reunión. "Es la única forma de hacerlos responsables", ha señalado.
En las sesiones de trabajo también participarán diez mujeres en representación de las órdenes religiosas femeninas, además de dos funcionarias del Vaticano. Está previsto que el Papa participe en todas las sesiones y el domingo 24 pronunciará un discurso final.