Las obras que permitirán quitar las concertinas de las vallas de Ceuta y Melilla comenzarán este mismo mes
Se "recimentará" el vallado y se elevará la altura en tramos vulnerables, pero no se concreta cómo se sustituirán las cuchillas
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El Ministerio del Interior ha informado de que las obras de modernización y refuerzo de la seguridad en la valla fronteriza de Ceuta y Melilla comenzarán antes de que acabe el mes de noviembre. Estas obras tendrán una duración de diez meses y permitirán la eliminación de las concertinas y su sustitución por otros elementos más seguros y menos cruentos, tal y como ha recalcado el departamento.
Las concertinas son unos alambres equipados con cuchillas cortantes instalados en las vallas fronterizas desde el año 2005, bajo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. A su llegada al Gobierno en junio de 2018, el ministro Fernando Grande-Marlaska se marcó como "prioridad" su supresión, y la previsión es que estén totalmente retiradas en 2020.
Estas obras de modernización y refuerzo de las vallas están contempladas en plan de infraestructuras de seguridad del Estado, aprobado en enero de este año. El plan supone una inversión total de 32 millones de euros, de los cuales son para estas obras casi 18 millones de euros (8,4 millones para Ceuta y 9,6 para Melilla) y va a permitir la primera actuación integral y de modernización tecnológica en los últimos 13 años en el perímetro fronterizo, tal y como destaca Interior.
El Ministerio del Interior ha encargado a la empresa de Transformación Agraria S.A. (TRAGSA) la ejecución de las obras que permitirán la sustitución de las concertinas y las sirgas tridimensionales en todo el perímetro "por otros elementos más seguros y menos lesivos".
Según ha precisado el departamento dirigido por Grande-Marlaska, esta compañía llevará a cabo "la recimentación del vallado y la sustitución de las concertinas", si bien no precisa cómo las sustituirá y si se utilizarán otros elementos para coronar las vallas. También construirá "nuevos tramos en las zonas de mayor vulnerabilidad, con un incremento de altura de hasta diez metros".
Grande-Markasca ya concretó en verano que solo se retirarían las concertinas de "las zonas más vulnerables", es decir, las que han sido objeto de mayores intentos de salto. Asimismo, manifestó que la alternativa sería elevar un 30% la altura de la valla precisamente en esos puntos más sensibles a los saltos hasta situarla en los 10 metros, al tiempo que señaló que se coronará con elementos que dificultarán el salto pero sin ser "lesivos".
Para la realización de estos trabajos, se ha hecho previamente un estudio técnico completo de la situación actual de las infraestructuras y una búsqueda, análisis y evaluación de alternativas técnicas, entre otras cosas. El citado estudio ha corrido a cargo de la empresa pública Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España (ISDEFE), dependiente del Ministerio de Defensa.
En este contexto de necesidad de refuerzo y modernización del sistema de protección fronteriza terrestre en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, el plan comprende actuaciones a corto y medio plazo en ambos perímetros fronterizos.
"TRASCENDENCIA" DE ESTAS OBRAS
Tal y como destacan desde Interior, las obras en la valla fronteriza son las de mayor trascendencia, tanto desde un punto de vista operativo y de lucha contra las redes de tráfico de personas, como por la mayor complejidad técnica en su ejecución.
Pero además de este refuerzo de la valla perimetral en Ceuta y Melilla, ya han sido ejecutadas dos de las intervenciones estratégicas del plan aprobado por el Gobierno. Se trata del nuevo sistema de circuito cerrado de televisión en el perímetro fronterizo de Ceuta que incluye 66 cámaras, 14 de ellas térmicas, y que está operativo desde mayo de 2019; y de la instalación de sistemas de reconocimiento facial en los puestos fronterizos de El Tarajal (Ceuta) y Beni Enzar, Barrio Chino, Mariguari y Farhana (Melilla).
Interior informa de que en proceso de ejecución se encuentran las obras de adecuación de las zonas de tránsito de peatones y otras mejoras en el puesto fronterizo de El Tarajal, así como la instalación de una nueva red de fibra óptica y ampliación del sistema de circuito cerrado de televisión en el perímetro fronterizo de Melilla.