La lluvia, la nieve y el frío seguirá el fin de semana y la próxima semana en toda España menos en Canarias
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El tiempo inestable, con nubes abundantes y precipitaciones en buena parte de la mitad norte, donde se seguirán produciendo nevadas seguirá el fin de semana y la próxima semana en toda España menos en Canarias, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
En la mitad sur las precipitaciones serán más dispersas y en Baleares además serán probables también algunas tormentas.
Las precipitaciones más persistentes y localmente fuertes se podrán producir en el Cantábrico, especialmente el domingo, cuando también se esperan tormentas ocasionales.
Asimismo, serán en forma de nieve en cotas bajas para esta época del año, a partir de 700 a 900 metros aunque subirán por encima de 1.000 metros el domingo.
El fin de semana las temperaturas también serán "apreciablemente" bajas y las mínimas serán más propias de fechas de pleno invierno. El viento soplará del oeste y tendrán probables intervalos de viento fuerte en el interior de las comunidades de Levante peninsular.
En Canarias también se producirán lluvias ocasionales en el norte de las islas más montañosas este fin de semana y la próxima semana también se prevé un tiempo "relativamente estable", aunque no se descartan algunas precipitaciones débiles y ocasionales en el norte de las islas de mayor relieve y las temperaturas apenas registrarán cambios.
La próxima semana seguirá la inestabilidad en el norte de la Península, porque se mantendrá el flujo de aire húmedo procedente del Atlántico. De ese modo, seguirán produciéndose precipitaciones persistentes en el Cantábrico donde incluso podrán ser puntualmente fuertes, sobre todo en el litoral.
Las lluvias y las nevadas también se pueden producir pero con menor probabilidad e intensidad en los sistemas montañosos Central e Ibérico y en zonas aledañas.
Finalmente, la AEMET expone que los vientos soplarán de componente oeste aunque tenderán a girar a componente sur a partir del miércoles. Eso provocará que las precipitaciones se extiendan por la vertiente atlántica, siendo menos probables en el Cantábrico. Con el cambio del viento llegará un ascenso térmico y las temperaturas recuperarán los valores habituales para esta época del año.