El portavoz de los obispos españoles afirma que ha habido "una crisis de liderazgo" ante la pandemia
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y obispo auxiliar de Valladolid, Luis Argüello, considera que ha habido una "crisis de liderazgo" en España durante la pandemia del coronavirus COVID-19 y espera que el "elogio de lo público" que se está dando durante estos días no se convierta en "un elogio de lo estatal".
"Que ha habido una crisis de liderazgo es casi evidente, por la novedad, por el asombro de la situación, por los momentos tan imprevisibles, por estar a la espera de lo que los técnicos o los políticos dicen, por el miedo a tomar decisiones o la reserva por las consecuencias que pudiera tener en el momento social y político concreto", ha afirmado Luis Argüello este martes 5 de mayo, durante un foro telemático organizado por la Fundación Pablo VI, en el que ha conversado con la filósofa y consejera permanente de Estado Victoria Camps.
Además, Argüello ha asegurado que le "preocupa" que "el elogio de lo público que se está haciendo estos días sea un elogio de lo estatal" porque, según ha precisado, "lo público no coincide plenamente con lo estatal, con las administraciones públicas" sino que es "el espacio de lo común, el ágora, la plaza".
En este sentido, ha apuntado que "el buen liderazgo es aquel que convoca" a las personas a "ponerse en marcha", a que "caigan en la cuenta de que son responsables de su vida y de lo común", y ha lamentado que en este momento de Estado de Alarma, "las resonancias del Estado suenan con excesiva fuerza". "Hay un excesivo descanso de los ciudadanos, diciendo: 'Esto nos lo solucionará el Estado'", ha comentado.
A esto se suma, según ha añadido Argüello, el hecho de que en estos momentos "los partidos políticos están reduciéndose a una cúpula, a veces a un liderazgo en prácticamente todo el espectro". Ante esta situación, ha hecho un llamamiento a "superar la dialéctica de los contrarios".
EL ESTADO NO HA CONFIADO EN LOS CIUDADANOS
Precisamente, Victoria Camps ha invitado a reflexionar sobre que en España, durante el Estado de Alarma, los ciudadanos "han hecho muchas cosas por coacción" porque "no se ha confiado" en las personas frente a la experiencia de Suecia basada en la responsabilidad individual de los ciudadanos.
"Quizá espontáneamente las hubiéramos hecho pero ni el Estado ha confiado en la ciudadanía, ni los ciudadanos han confiado los unos en los otros. Hay una cierta sanción social con respecto al comportamiento ciudadano: este se va a la segunda residencia, este no se pone mascarilla o se acerca demasiado. El papel represor del Estado ha tenido que funcionar", ha argumentado.
Por otro lado, ambos ponentes se han referido a los "fallos" en la gestión de la crisis del coronavirus en las residencias de mayores. En concreto, Luis Argüello ha invitado a no solo pedir responsabilidades a las administraciones públicas o a los propios centros sino a "repensar" si se debe llevar a los ancianos a estos asilos.
¿POR QUÉ LLEVAR A LOS MAYORES A RESIDENCIAS?
"No sería una buena cosa que en el asunto de los mayores pensáramos en pedir responsabilidades a la administración pública o a cómo lo han gestionado los directivos de las residencias, porque hay una cuestión previa: ¿Por qué hemos tenido que llevar a los mayores a las residencias? Lo digo sin un afán de culpabilizar a nadie sino con un deseo de repensar", ha señalado el obispo.
Asimismo, tanto Argüello como Camps han remarcado que la crisis del coronavirus ha puesto en evidencia la necesidad de interdependencia de los seres humanos y ha puesto en cuestión algunos pensamientos según los cuales el hombre no tiene límites o algunos movimientos como el transhumanismo, que pretende mejorar a la humanidad a través de la tecnología para llegar a estadios de superinteligencia, superlongevidad o superfelicidad.
"Mucha gente entre nosotros, aunque desde el punto de vista global, poco visibles, llevaban tiempo planteando cuestiones como el transhumanismo, como la posibilidad de que la ciencia nos ayudase a erradicar la enfermedad o como el planteamiento del escándalo del sufrimiento llegando incluso a decir que es preferible no nacer a nacer para sufrir, o morir a seguir viviendo para sufrir o hacer sufrir a otros", ha planteado Argüello.
En concreto, Camps ha añadido que el transhumanismo es "acabar con el ser humano de alguna forma". "Eso la naturaleza no lo tolera y se ha visto la experiencia del coronavirus como una cierta venganza de la naturaleza, aquí no es verdad que el ser humano pueda llegar a dominarlo todo, la muerte está presente, la finitud y los límites están presentes", ha precisado.
Sobre el futuro cercano, y preguntados sobre si el confinamiento ha hecho a las personas mejores, Luis Argüello ha dicho que no cree que sea así. "Decir sin más que este tiempo nos hace mejores es optimista, en el sentido peor de la expresión", ha apuntado. No obstante, Victoria Camps ha puesto de manifiesto durante la conversación que se ha producido "un cambio de prioridades vitales", volviéndose la gente "necesariamente más austera" y que esto puede llevar a una reflexión sobre "el sentido de la vida" y "la plenitud". En todo caso, ha puntualizado que es "difícil cambiar las costumbres".