El Gobierno incluye 6 nuevos contaminantes químicos en el Plan Nacional para erradicarlos o limitarlos

Por

Europa Press | 31 oct, 2019

MADRID, 31 (EUROPA PRESS)

El Consejo de Ministros ha acordado incluir seis nuevos contaminantes químicos en el Plan Nacional de aplicación del Convenio de Estocolmo y el Reglamento sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP), de modo que con esta actualización quedan incluidos todos los COP que recoge el citado convenio hasta mayo de 2017.

La contaminación química, que según la Organización Mundial de la Salud se cobró la vida de 1,6 millones de personas en 2016, es una de las principales responsables de la pérdida de biodiversidad, produce alteración de los ecosistemas y amenaza una amplia gama de servicios ecosistémicos, como es el caso de la disminución del número de polinizadores o la presión negativa sobre los arrecifes de coral, según explica el Ejecutivo.

Así, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica, el Consejo de Ministros ha actualizado el plan para incorporar estos seis compuestos altamente tóxicos, muy persistentes, bioacumulables y, además, pueden ser transportados a largas distancias.

La combinación de estas cuatro características hace que estos contaminantes sean capaces de producir efectos negativos a niveles muy bajos, lo que les convierte, de entre todos los productos químicos artificiales, en los más peligrosos, representando un problema a escala global.

Una vez modificado el plan, este se remitirá a la Comisión Europea y a la Secretaría del Convenio de Estocolmo. La capacidad de producción química mundial, sin incluir los productos farmacéuticos, se cifra en 2.300 millones de toneladas en el año 2017 y se estima que esta cifra se duplicará para 2030.

Pese a las distintas medidas adoptadas para minimizar los impactos, las sustancias químicas sintéticas continúan siendo liberadas al medio ambiente en cantidades considerables y por ello, están presentes en aire, agua, suelo, alimentos, artículos, productos y residuos y, también, en los seres humanos.

Los COP son compuestos químicos artificiales que han sido producidos intencionalmente por tener propiedades muy eficaces para determinados usos, como plaguicidas en agricultura, o en usos industriales muy diversos debido a su eficacia como aislantes o como retardantes de llama para equipos eléctricos, polímeros y fibras, tratamientos de superficie, etcétera.

Para estos COP producido de forma intencionada, el Convenio prescribe la prohibición de su producción, uso y comercialización y la eliminación segura de las existencias y residuos que los contengan.

De ese modo, estos COP han sido sustituidos por sustancias alternativas que pueden cumplir su funcionalidad y sean menos o nada peligrosas o por alternativas no químicas.

Por otro lado, otro grupo de COP, son los que se forman y liberan de manera no intencional a partir de procesos térmicos que comprenden materia orgánica y cloro, como resultado de combustión incompleta o de reacciones químicas. Un ejemplo de estos COP no intencionales son las dioxinas.

Para estos COP no intencionales el Convenio prescribe la reducción de estas emisiones no intencionales mediante el uso de las mejores técnicas disponibles, manteniendo como objetivo último su eliminación. Tanto el Convenio (artículo 7) como el Reglamento europeo (artículo 8) establecen la obligación de elaborar y actualizar Planes Nacionales de Aplicación (PNA) para el cumplimiento de las obligaciones en ellos establecidas.

A las 12 sustancias inicialmente recogidas en el Convenio, denominadas "la docena sucia", se han ido incorporando gradualmente otras que han acreditado tener características COP.

En la actualidad ya son 28, algunas de las cuales son familia de hasta cientos de especies químicas que han sido utilizadas en sectores muy diversos.

Los seis nuevos COP incluidos son el hexabromociclododecano (HBCD); hexaclorobutadieno (HCBD); pentaclorofenol y sus sales y ésteres (PCP); naftalenos policlorados (PCN); decabromodifenil éter y parafinas cloradas de cadena corta (PCCC), todos ellos de producción intencional, aunque HCBD y PCN se pueden generar también de manera no intencional.

El Plan Nacional de Aplicación busca identificar los problemas asociados a los COP en todo su ciclo de vida, diagnosticar la realidad de España y definir medidas encaminadas a lograr su eliminación y, cuando esto no sea posible, la minimización de estos peligrosos contaminantes.

Últimas noticias