La OCU pide mejoras en los menús hospitalarios para evitar malnutrición en los pacientes
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha solicitado mejoras en los menús hospitalarios para evitar malnutrición en los pacientes, avisando de que hasta un 40 por ciento de los alimentos que se sirven en los hospitales vuelven a la cocina sin haberse consumido.
A su juicio, el desperdicio alimentario se debe, además de a factores ambientales y que la propia enfermedad y medicación pueden afectar al apetito o al sentido del gusto, a la "comida en sí misma". "Los menús de los hospitales tienen en ocasiones materias primas de buena calidad, pero un aspecto poco atractivo con colores, sabores y aromas apagados, especialmente, cuando se trata de dietas restrictivas, que limitan la ingesta de ciertos alimentos", ha dicho la organización.
En este punto, la OCU ha avisado de que a lo largo de las tres últimas décadas diferentes estudios han estimado que la desnutrición afecta a entre un 20 por ciento y un 80 por ciento de los pacientes hospitalizados. Además, prosigue, los estudios también han constatado que la probabilidad de malnutrición aumenta cuanto más larga es la estancia hospitalaria, lo que indica que existe una relación entre ambas.
"La malnutrición hospitalaria es, por tanto, un problema relacionado con la atención sanitaria y al que se le debería prestar mayor atención. La desnutrición no debería de ocurrir en un centro sanitario, ya que los menús deberían estar diseñados por expertos para cubrir las necesidades de cada paciente", ha dicho la organización, para comentar que un "buen menú debe atender a las consideraciones de tipo médico y, al mismo tiempo, resultar apetitoso para que el paciente lo coma".
No obstante, ha criticado que esto "no siempre ocurre" ya que en algunos centros hospitalarios el desayuno presenta un exceso de hidratos de carbono rápidos, con galletas, mermelada y zumo envasado. A su juicio, se debería aumentar la presencia de cereales integrales, verduras frescas y frutas de temporada que, a veces, son sustituidas por postres industriales.
"La nutrición hospitalaria mejoraría con un mayor número de nutricionistas que puedan comunicarse directamente con los pacientes, conocer sus gustos y ajustar mejor sus dietas, ofreciendo incluso la posibilidad de elegir entre varios menús a aquellos pacientes que no tengan restricciones. Además, se debería cuidar el emplatado y la presentación y, por supuesto, hacer un control de las bandejas al salir de las habitaciones para detectar a los pacientes que no coman lo suficiente", ha apostillado.
Finalmente, la Organización de Consumidores y Usuarios ha subrayado la necesidad de que el sistema público de salud evalúe el estado nutricional de los enfermos al ingreso y lo mejore "en lo posible", como parte del tratamiento hospitalario.