Expertos avisan de que suspender terapias oftalmológicas puede suponer una pérdida irreversible de visión
MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
Los expertos de la Unidad de Retina, Mácula y Glaucoma del grupo oftalmológico Oftalvist han avisado de que, como consecuencia del confinamiento por el coronavirus, se suspendan tratamientos oftalmológicos urgentes ya que puede provocar una pérdida irreversible de visión.
"Las distintas sociedades oftalmológicas nacionales e internacionales insisten en la necesidad de tratar de inmediato a todos los pacientes en los casos urgentes que precisen cirugía, como los traumatismos oculares graves, desprendimiento de retina, infecciones oculares graves, o el glaucoma severo", ha dicho el doctor de la clínica Oftalvist, Roberto Gallego.
Los pacientes con enfermedades crónicas de la mácula deben acudir a consulta para recibir sus inyecciones intravítreas. En este sentido, la doctora Beatriz Gonzalo ha explicado que los pacientes con degeneración macular asociada a la edad, retinopatía diabética, trombosis venosas o miopía magna deben seguir acudiendo a sus centros oftalmológicos, donde les tratarán de acuerdo a los protocolos establecidos y con todas las garantías de seguridad.
"En el caso de los pacientes con degeneración macular (DMAE), suspender las inyecciones intravítreas programadas pueden condicionar una pérdida severa e irrecuperable de visión. Esta pérdida visual no podría recuperarse por completo posteriormente", ha añadido la doctora Gonzalo.
Asimismo, los pacientes con retinopatía diabética, edema macular diabético, edema macular por trombosis venosas de la retina, o pacientes con degeneración macular miópica también necesitan continuar su tratamiento intravítreo programado para evitar una importante limitación de la vista.
Del mismo modo, la doctora de la Unidad de Glaucoma de Oftalvist, Marta Ibarze, ha explicado que los pacientes con glaucoma deben continuar con sus colirios de forma habitual, solicitando la renovación de sus recetas médicas si fuera necesario.
LA IMPORTANCIA DE LA DETECCIÓN PRECOZ
Este tipo de patologías que requieren un importante control y seguimiento, ya que la retina y el nervio óptico son estructuras que al lesionarse pueden dejar secuelas permanentes y muy graves. Por ello, es importante llevar a cabo exploraciones oftalmológicas y pruebas diagnósticas con cierta regularidad para vigilar y controlar los cambios y poder iniciar el tratamiento el momento adecuado.
"Si esperamos a que el paciente presente síntomas de la enfermedad como pérdida de visión, o sensación de ver torcido (metamorfopsia), el daño puede ser ya importante. En el caso de las enfermedades de la retina, el retraso en el tratamiento produce daño irreparable en los tejidos. Aunque se retome el seguimiento más adelante, las secuelas podrían ser permanentes con pérdida de agudeza visual, generalmente de la visión central", ha añadido la doctora Gonzalo.
Algo parecido ocurre a los pacientes con glaucoma, ya que si se suspende el tratamiento, puede producirse una subida de presión intraocular que de no ser detectada por el especialista puede desencadenar pérdida de campo visual de forma definitiva.