AztraZeneca, Pfizer, Moderna... ¿cuál es más segura y cuál produce más reacciones?
Según avanza la vacunación van surgiendo dudas acerca de la seguridad de las inyecciones
Actualizado : 19:09
Las vacunas, al igual que cualquier otro tipo de medicamento, pueden ocasionar algunos efectos secundarios. Estos pueden ser leves o poseer una gravedad mayor. Así sucede también con las nuevas vacunas contra el coronavirus.
Pfizer, Moderna, AstraZeneca... Son varias las vacunas aprobadas por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) y puestas a disposición de los países europeos, entre los que se incluye España.
En nuestro país, la Estrategia de Vacunación Covid-19 se inició el pasado 27 de diciembre de 2020, con la inmunización de residentes y personal sanitario y sociosanitario que trabaja en centros de mayores y de atención a grandes dependientes. Poco a poco, se ha continuado con esta estrategia de vacunación y, actualmente, ya hay 1.261.848 personas que han recibido la pauta completa y están, por tanto, inmunizadas.
Sin embargo, según avanza la vacunación van surgiendo dudas acerca de la efectividad de las vacunas disponibles y, sobre todo, de los efectos secundarios que estas producen.
VACUNA PFIZER
Según recoge el Ministerio de Sanidad, esta vacuna tiene como componente principal al ARNm que codifica para la producción de la proteína S de SARS-CoV-2. La pauta de vacunación es de dos dosis con una separación de 21 días entre ellas y tiene una eficacia del 95%.
Es común que los efectos secundarios de esta vacuna aparezcan tras la administración de la segunda dosis.
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Pfizer estudia aplicar una tercera dosis de su vacuna ante las nuevas variantes de CovidEn el prospecto de la misma aparecen como efectos secundarios muy frecuentes (es decir, que pueden afectar a más de 1 de cada 10 personas) dolor e hinchazón en el brazo del pinchazo, cansancio, dolor de cabeza, muscular y de articulación, escalofríos y fiebre. Suelen aparecer entre uno y dos días después de recibir la inyección y no suelen durar más de 48 horas, aunque pueden aparecer en cualquier momento de la primera semana después de la vacunación, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Por otro lado, el prospecto incluye como efectos frecuentes (que pueden afectar hasta a 1 de cada 10 personas) el enrojecimiento de la zona del pinchazo y náuseas.
Entre los efectos poco frecuentes (que afectan hasta a 1 de cada 100 personas) están el aumento de tamaño de los ganglios linfáticos, malestar, dolores en las extremidades, insomnio y picor en el lugar del pinchazo.
Y, por último, los efectos raros (los que afectan hasta a 1 de cada 1.000 personas) incluyen la caída o parálisis temporal de un lado de la cara. Además, en una frecuencia no conocida estarían las reacciones alérgicas graves.
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ha ido siguiendo la situación con el objetivo de proporcionar datos acerca de los posibles efectos secundarios de las vacunas en España. El último informe actualizado es el segundo informe de farmacovigilancia de las vacunas contra el Covid-19, del pasado 9 de febrero.
El informe establece que, de las 1.112.982 dosis de la vacuna de Pfizer que se administraron hasta el 24 de enero, solo se reportaron 1.537 casos de efectos adversos, es decir, 138 notificaciones por cada 100.000 dosis inyectadas. El cómputo general incluye 3.790 descripciones de efectos adversos.
También recoge que los efectos secundarios más frecuentes son los que hacen referencia a episodios como fiebre y dolor en la zona de la inyección, seguidos de cefaleas y mareos y los trastornos gastrointestinales (náuseas y diarrea).
VACUNA MODERNA
La vacuna Moderna, al igual que Pfizer, tiene como componente principal al ARNm y la inmunización se adquiere tras la inyección de dos dosis. Posee una eficacia del 94,5%.
Igualmente, los efectos secundarios más frecuentes que recoge Sanidad se dieron tras la segunda dosis y son más comunes en las personas más jóvenes. También suelen aparecer uno o dos días después de la vacuna y pueden prolongarse varios días.
El prospecto de la vacuna incluye como efectos secundarios muy frecuentes (pueden afectar a más de 1 de cada 10 personas) hinchazón en la axila, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, dolor y rigidez muscular y de las articulaciones, dolor o hinchazón en el lugar de la inyección, sentirse muy cansado, escalofríos o fiebre.
Entre los efectos frecuentes (pueden afectar hasta 1 de cada 10 personas) se encuentran la erupción cutánea, enrojecimiento o urticaria en el lugar de la inyección.
Como efectos poco frecuentes (pueden afectar hasta 1 de cada 100 personas) recoge picor en el lugar de inyección.
Entre los raros (pueden afectar hasta 1 de cada 1000 personas) incluye la caída facial unilateral temporal (parálisis de Bell) o hinchazón de la cara (la hinchazón de la cara puede ocurrir en pacientes que han recibido inyecciones estéticas faciales).
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El Gobierno da luz verde a la compra de 17 millones más de dosis de la vacuna ModernaLos efectos adversos más frecuentes en España, según el Ministerio de Sanidad, son fiebre o dolor en la zona de inyección, cefaleas y mareos) y dolor de la extremidad donde se administró la vacuna y artralgia (dolor en las articulaciones), siendo mayoritariamente de intensidad leve o moderada y desapareciendo unos días tras la vacunación.
Sanidad recoge en el Informe de Farmacovigilancia un total de 18 notificaciones de acontecimientos adversos, lo que correspondería a 96 notificaciones por cada 100.000 dosis administradas.
VACUNA ASTRAZENECA
Esta es la vacuna que, sin duda, más controversia está generando. Es la que más ha tardado en estar disponible, desde principios de febrero de 2021 y, a diferencia de la de Pfizer y Moderna, está compuesta por un adenovirus que contiene el material genético (ADN) que codifica para la producción de la proteína S de SARS-CoV-2. Igualmente, tiene una eficacia algo inferior a las otras dos (entre el 60% y el 70%), pero se puede conservar a temperaturas más altas que las que necesitan Moderna y Pfizer.
La preocupación viene porque los ensayos clínicos no han demostrado eficacia en grupos de personas mayores de 55 años y porque está generando más efectos adversos que las otras dos vacunas disponibles. Cambia también respecto a las otras que los efectos secundarios suelen darse con mayor frecuencia tras la aplicación de la primera dosis, y no tras la segunda.
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Sanidad no administrará la vacuna de AstraZeneca a los mayores de 80 añosEl Ministerio de Sanidad ha confirmado que se están registrando "reacciones locales y sistémicas leves frecuentes tras la vacunación" y ha recomendado tomar paracetamol de 1 gramo antes y después de la vacunación, cada seis horas durante las primeras 24 horas tras la vacunación. Si se da sintomatología, no suele durar más de 48 horas.
En el prospecto de la misma, se citan como efectos secundarios muy frecuentes (pueden afectar a más de 1 de cada 10 personas) sensibilidad, dolor, calor, picor o moratones en el sitio de la administración de la inyección, sentirse cansado (fatiga) o malestar general, escalofríos o sensación de fiebre, dolor de cabeza, sentirse enfermo (nauseas), dolor articular o dolor muscular.
Entre los efectos secundarios frecuentes (pueden afectar hasta 1 de cada 10 personas) se recogen el enrojecimiento o hinchazón en el sitio de administración de la inyección, fiebre (>38°C), vómitos o diarrea.
Como poco frecuentes (pueden afectar hasta 1 de cada 100 personas) puede darse somnolencia o sensación de mareo, disminución del apetito, ganglios linfáticos agrandados o sudoración excesiva, picor de la piel, prurito.
VACUNARSE ES LO MÁS SEGURO
En resumen, existen algunas diferencias entre las diferentes vacunas, sobre todo sobre cuándo se producen esos temidos efectos secundarios. En el caso de Pfizer y Moderna, estos suelen darse tras la administración de la segunda dosis; mientras que en el caso de AstraZeneca, estos son más frecuentes en la primera dosis.
Por lo general, estos efectos secundarios son leves y los más comunes son el dolor, inflamación o enrojecimiento donde se ha administrado la vacuna, fiebre leve, escalofríos, cansancio, dolor de cabeza o muscular y articular. Estos suelen mejorar a los pocos días tras la inyección y hay que tener en cuenta que los efectos secundarios más comunes son una señal de que el cuerpo está comenzando a desarrollar inmunidad contra una enfermedad.
Por último, hay que recordar que vacunarse es mucho más seguro que contraer la enfermedad que previenen las vacunas.