El conseller Felip Puig, en el punto de mira de las investigaciones sobre los Pujol Ferrusola

El actual conseller d’Ocupació i Empresa, Felip Puig, que recientemente tuvo que salir al paso de las acusaciones que lo vinculaban con los negocios del hijo del ex president de la Generalitat, Jordi Pujol Ferrusola, vuelve a estar bajo la sospecha de la brigada de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional. Se investigan los fondos con los que adquirió su casa en la localidad catalana de Bellver de Cerdanya, con los que también financió su reforma.

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Destaca eldiario.es esta línea de las pesquisas de la UDEF y puntualiza que fuentes policiales precisan que la investigación sobre Puig no significa que se haya abierto la veda para perseguir a los dirigentes catalanes. El caso de Puig es especial dada su relación personal con Jordi Pujol Ferrusola y la estrecha amistad que los une desde la infancia.

El informe de la UDEF remitido a la Audiencia Nacional, donde se recogen los movimientos empresariales del entramado de sociedades de Jordi Pujol Ferrusola, vincula a Puig con la concesión administrativa de la reforma de la Gran Vía de l'Hospitalet de Llobregat (Barcelona). Este proyecto se desarrolló mediante una unión temporal de empresas en la que participaban Copisa y FCC. El proyecto, de 90 millones de euros, lo adjudicó el departamento de Puig en 2002, mientras era conseller de Obras Públicas.

También se especula con que el hermano de Puig, Jordi Puig i Godes, hacía negocios con el primogénito de Jordi Pujol.

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LOS PUJOL FERRUSOLA, LAS CONCESIONES ADMINISTRATIVAS Y PUIG

En 2004 Puig ya fue investigado por el caso del pago de comisiones y otras supuestas ilegalidades en las obras de rehabilitación de las viviendas gestionadas por la empresa pública Adigsa, durante su paso por Benestar Social. Fue el momento de la ya mítica frase del ex president de la Generalitat, Pasqual Maragall en el Parlament de Catalunya: “Ustedes tienen un problema que se llama 3%”, en referencia a las comisiones que CiU supuestamente recibía por las adjudicaciones administrativas y que es la génesis del escándalo de los Pujol Ferrusola.

Uno de los imputados en el caso Adigsa, el empresario José María Penin declaró que tanto Felip Puig, como Oriol Pujol Ferrusola, hijo del ex presidente de la Generalitat, estaban al tanto de lo que ocurría.

En la última etapa del Gobierno de Jordi Pujol i Soley estuvo al frente de Obras Públicas. Fue la época en la que otorgó las principales adjudicaciones al grupo constructor Ferrovial y que constituyen el grueso del caso Palau de la Música, por el que CDC es responsable civil como beneficiario de 14 millones de euros del expolio que llevaron a cabo Félix Millet y Jordi Montull.

Puig, sin embargo, nunca fue llamado a declarar com imputado por el caso.