Adiós al 'vicepapa' español Rouco, que sale por la puerta de atrás

"Indignado e incómodo, el cardenal Rouco Varela no daba crédito a lo que estaba pasando", así empieza un artículo del portal Religión Digital en el que se llega a asegurar que Rouco Varela se sintió "hundido" después de que el Nuncio le comunicara que el Papa aceptó su renuncia.

Los cierto es que el Nuncio de Su Santidad en España, Renzo Fratini, le comunicó al cardenal Antonio María Rouco Varela que el Santo Padre ha aceptado su renuncia como arzobispo de Madrid, según informaba el viernes La Razón."El "embajador" del Vaticano en nuestro país le ha notificado oficialmente el fin de ciclo al frente de una de las principales archidiócesis de nuestro país", destacaba el medio.

LA REACCIÓN DEL CARDENAL

En todo caso, según el portal RD, el cardenal ha tenido que hacer gala de todo su autocontrol ante el Nuncio, aunque en su mente martilleaba sin cesar una idea: Roma estaba cometiendo una gran injusticia con él. En el fondo y en la forma.

Es más, afirman que Rouco se sentía humillado. "Los que le han visto estos días aseguran que "casi llora por las esquinas" y que, en privado, no hace más que lamentarse. Repite al que quiere oírle casi lo mismo que le dijo al Nuncio: "Con lo bien que estoy de salud, puedo seguir. Hace una semana que estuve en Roma y nadie me dijo nada. Y, ahora, me lo sueltan a través del Nuncio. Con Benedicto XVI no habría pasado", asegura José Manuel Vidal, el autor del artículo.

En su entorno, que cada vez presenta más grietas, aseguran que "cuando se lo dijo el Nuncio, se pilló un rebote monumental y, ahora, está afectadísimo. No quiere irse. No acepta la idea de tener que dejar el cargo y pasar a ser emérito". Su enfado es tal que, a algunos llegó a decirles que, venga quien venga, él se va a quedar en Madrid. Más aún, amenaza con permanecer en el propio palacio de San Justo, residencia de los arzobispos madrileños: "Haremos un piso abajo para el que venga y yo me quedaré arriba, en mi casa de siempre", destaca.

En todo caso, en La Razón, aseguraban que no será hasta finales de agosto o inicio de septiembre cuando se haga público el cese. ¿La razón? Sería una muestra de atención al cardenal, que cumple 78 años el próximo 20 agosto, por lo que la decisión se podría hacer pública el día 28, aunque podría retrasarse al 8 de septiembre, al parecer a petición del propio Rouco Varela a la Congregación de Obispos, por razones de un viaje a Alemania ya programado.

En el artículo concluyen por su parte que la sucesión de Rouco mantendrá a la Iglesia española en standby en el mes de agosto. "Se va el cardenal Cisneros, sin poder alargar más su reinado y sin haber podido nombrar a su sucesor. Un adiós triste para el vicepapa español".