El rally del dólar está "agotado" aunque los republicanos ganen las 'midterms'

El destino del dólar en los dos meses escasos que quedan para cerrar 2018 quedaría decidido el 6 de noviembre, cuando los estadounidenses acuden a las urnas para las eleciones legislativas. Estos comicios, también conocidos como de medio mandato, se suelen considerar como un termómetro de la opinión pública sobre los dos años de presidencia del inquilino de la Casa Blanca y los riesgos se aplican sobre el presidente Donald Trump, que podría ver cómo pierde control del Congreso y cómo se revierte el rally del dólar en 2018, de más del 5% en el índice que mide su desempeño. Una reacción previsible aunque venza el partido en el poder, según algunos expertos.

Los electores votan la Cámara de Representantes del Congreso en su totalidad, un tercio del Senado -ambos actualmente en poder de los republicanos-, los gobernadores de 36 estados y, por último, se renueva por la vía electoral un alto porcentaje de cámaras legislativas estatales; 87 de 99. Y los analistas coinciden en señalar que una “oleada azul” de demócratas en ambas cámaras podría acabar con los tiempos de bonanza para la divisa estadounidense.

La vistoria demócrata despejará el camino de un 'impeachment' a Trump, "uno de los mayores riesgos actualmente"

La razón principal reside en que el mercado teme que si los republicanos pierden cota de poder, se esfumen los motivos que han apuntalado a la moneda en los meses anteriores, ya que la mayoría que ostenta hasta ahora el partido de Trump ha alimentado el auge del 'billete verde'. La moneda se ha apreciado por la legislación aprobada hasta la fecha y los planes de los demócratas no contemplan seguir apoyando la flexibilidad fiscal.

Varios expertos convienen que una victoria demócrata en noviembre haría que una segunda ronda de recortes de impuestos y reformas fuera mucho más difícil de aprobar en el Congreso, mientras que los esfuerzos para derogar regulaciones innecesarias y reducir la burocracia para las empresas se antojan casi imposibles. Sin olvidar que despejaría el camino de un 'impeachment' a Trump, “uno de los mayores riesgos actualmente, que no se halla descontado por el mercado”, indica George Pizarro, de IG Markets.

Recuerdan, asimismo, que el control republicano del Congreso facilitó las medidas que han llevado a la economía de los Estados Unidos a fortalecerse este año, cuando el crecimiento en otras partes del mundo se ha desacelerado. En este contexto, según Bank of America, “una mayoría del partido en la oposición sería una mala noticia para el dólar. Por lo contrario, una exitosa defensa republicana de su mayoría constituye la única esperanza del dólar de mantener las cotas elevadas a las que ha subido en 2018”.

Si como lo sugieren los precedentes históricos y las estadísticas, “los demócratas capturan al Senado, a la Cámara de Representantes o a ambos, el sentimiento de los inversores y los precios de las acciones podrían verse afectados”, comentan por su parte desde MoneyCorp. “Las tensiones comerciales han reforzado el dólar estadounidense, por lo que cualquier cambio o frustración en la política arancelaria causará fluctuaciones en la moneda”, agregan. En general, “si los demócratas pueden recuperar algo de control se generará mayor incertidumbre política que desembocará en un incremento de la volatilidad”, redondean estos analistas.

En caso de que las elecciones arrojaran como resultado un Congreso dividido, con los demócratas controlando la Cámara de Representantes, “haría imposible aprobar un recorte de impuestos 2.0, pero es más probable que se apruebe un programa de infraestructuras. En tal escenario, la Fed tendría que lidiar con los efectos estimulantes consecuentes con este desenlace", indica Stephen L. Jen, analista de Eurizon SLJ Asset Management.

RECONFIGURAR LAS POSICIONES

Con todo, un optimismo renovado en el dólar se ve limitado por el hecho de que la moneda ya se ha apreciado enormemente. Así, "la noción de que a excepcionalidad de este movimiento podría estar llegando a un punto de agotamiento empieza a calar entre los operadores", avisa Mazen Issa, estratega cambiario de TD Securities.

Otros expertos también exponen que la victoria del partido azul está descontada en el precio actual de la moneda, hecho que explica en gran parte su retroceso de las últimas sesiones, cuando ha retrocedido un 2% contra la libra y más de un 1% contra el dólar. Aunque el auge de las monedas europeas se ha visto también alimentado por otros factores, como el Brexit o un incremento del apetito por el riesgo ante la distensión de la guerra comercial entre China y EEUU.

Este cambio en el sentimiento hace pensar a Issa que, pase lo que pase en las ‘midterms’, pueden servir de excusa a los inversores para reconfigurar sus posiciones en el cierre del año, por lo que no se muestra nada optimista sobre el hecho de que una victoria republicana sea un "catalizador que permita a la moneda norteamericana siga con su escalada, ya que que el rally parece agotado".