El Banco de Japón aplaza de nuevo su objetivo de inflación

El Banco de Japón (BoJ por sus siglas en inglés) ha dejado su política monetaria sin cambios en la última reunión de la entidad y ha mantenido los tipos de interés en el -0,1%. También ha anunciado que aplaza el rango temporal para alcanzar sus objetivos de inflación hasta 2018.

Por otro lado, la entidad ha señalado que el débil crecimiento económico de Japón continuará expandiéndose moderadamente a medida que las exportaciones y el consumo resurjan. El gobernador del BoJ, Haruhiko Kuroda, también ha alertado del riesgo de que sus pronósticos sobre la economía estén sesgadas a la baja y de la debilidad de los precios, exhibiendo un tono pesimista que apoya su decisión de ampliar el tiempo en el que la entidad alcanzará su meta de la inflación en el 2%.

Así, la revisión trimestral de sus previsiones, publicadas junto a sus decisiones de política monetaria, revelan que el BoJ estima que no llegará a sus objetivos hasta “el año fiscal 2018”, lo que significa que Kuroda no cumplirá con su mandato sobre la inflación antes de que deje el cargo en abril de 2018.

El BoJ estima que no llegará a sus objetivos hasta “el año fiscal 2018”

Las previsiones del BoJ del mes de julio eran de que la subida de los precios al consumo llegara en el año fiscal 2017, que acaba en marzo de 2018, pero dada la débil demanda comercial y la menguante convicción de que los precios repuntarán en el corto plazo, el banco central ha rebajado sus perspectivas.

Como era ampliamente esperado, el BoJ ha dejado la tasa de interés sin cambios, anclada en terreno negativo y ha reafirmado su mandato de guiar el rendimiento de los bonos a 10 años alrededor del 0%.

El yen ha reaccionado a la baja y se ha depreciado moderadamente, un 0,2% hasta las inmediaciones de los 105 yenes por cada dólar inmediatamente después del anuncio.

EL RBA TAMBIÉN SIN CAMBIOS

En Australia, el Banco de la Reserva de Australia (RBA por sus siglas en inglés) también ha anunciado su decisión de tipos de interés y de política monetaria, sin cambios. Analistas de Westpac han señalado que la decisión estaba descontada y que coincide con sus perspectivas de que el banco central dejará los tipos de interés del dólar australiano en el 1,5%, sin cambios en lo que queda de 2017.

Estos expertos creen que el país alcanzará la banda baja del objetivo de los precios al consumo del RBA, en el entre el 2% y el 3% el año próximo y que habrá posibilidades de que el banco central decida abrazar nuevas medidas flexibilizadas si el crecimiento y el mercado laboral siguen dejando datos decepcionantes.