Nigel Farage, Nick Clegg y Ed Miliband: tres cabezas políticas que ruedan tras las elecciones en Reino Unido
El líder de UKIP no descarta volver a presentarse a la reelección como presidente de su partido
- Nick Clegg afirma que vive su hora más oscura
La demoledora victoria del Partido Conservador del primer ministro, David Cameron, ha provocado el desplome del resto de sus rivales políticos y antiguos socios de gobierno. La victoria absoluta de los tories ha eliminado prácticamente del mapa a sus antiguos socios de Gobierno, los liberal-demócratas de Nick Clegg, y ha dejado sin representación en Westminster al líder de la fuerza eurófoba UKIP, Nigel Farage. Ambos canditatos ya han presentado su dimisión.
El representante del Partido Laborista, Ed Miliban, también abandona la primera fila de la formación. Los laboristas se han situado como segunda fuerza política con 229 escaños, lejos de las expectativas que les otorgaban las encuestas. El meteórico ascenso del SNP escocés habría sido la principal causa de la pérdida de apoyos para los laboristas, ya que la fuerza nacionalista de Nicola Sturgeon se ha hecho con 56 de los 59 escaños posibles de la región y ha dejado al partido de Miliband prácticamente sin representación.
Durante su discurso de agradecimiento tras haber sido reelegido en Doncaster, Miliband ha reconocido a los miembros de la formación que representa su trabajo y ha admitido que ha sido "una noche muy decepcionante" para la fuerza que representa. Ha alertado también del auge del nacionalismo en Escocia y a Cameron le ha advertido que tiene la dura tarea por delante de mantener Reino Unido cohesionado.
Miliband: Reino Unido necesita un Partido Laborista fuerte
Horas más tarde, tras presentar su renuncia, ha defendido que “Reino Unido necesita un Partido Laborista fuerte”, proponiendo que Harriet Hartman tome las riendas del partido hasta que se designe a su sucesor.
LA HORA MÁS OSCURA DE CLEGG
Si hay un clarísimo perdedor de esta intensa jornada electoral en Reino Unido, ese es el Nick Clegg. Los liberal-demócratas han pasado de 57 escaños a ocho, en una caída sin precedentes que deja los resultados obtenidos en 2015 como los peores para la formación en 60 años. El partido ha sufrido las consecuencias de haber gobernado en coalición con los conservadores y han visto como los asientos que ostentaban hasta ahora en el parlamento han ido a manos de los tories y los laboristas, principalmente.
"Debo asumir mi responsabilidad y dimitir como líder de los liberales-demócratas. Es una hora oscura para nuestro partido", ha declarado Clegg.
NIGEL FARAE RENUNCIA AL LIDERAZGO DE UKIP
Cumpliendo con su compromiso de la campaña de las generales, cuando aseguró que dimitiría si no conseguía entrar en Westminster, El líder del UKIP, Nigel Farage, ha confirmado su renuncia al timón de su partido después de fracasar en su intento de obtener un escaño en el Parlamento, aunque no ha descartado presentarse de nuevo cuando la formación decida la sucesión el próximo septiembre.
Asimismo, avanzó que se "tomaría un descanso en verano, todo lo alejado de la política" que pudiese, si bien matizó que aprovecharía también para reflexionar sobre una potencial candidatura transcurridos los meses estivales, según informa Europa Press.
UKIP, que sólo habría conseguido un representante en la Cámara de los Comunes, ha obtenido casi un 13% de porcentaje de votos, lo que la sitúa como tercera fuerza más votada, sin embargo, el sistema de repartición de votos de Reino Unido no da una representación proporcional, si no uninominal.
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