El complejo trazado electoral de la carrera entre Clinton y Trump

Más de 230 millones de estadounidenses están citados con las urnas este martes 8 de noviembre. Tras depositar su voto, un complejo sistema electoral será el encargado de nombrar al nuevo inquilino de la Casa Blanca. Hillary Clinton o Donald Trump son los dos principales contendientes en esta lucha por ser el más apoyado o el menos castigado.

Su elección no es directa. Los ciudadanos delegan con su voto en los 538 compromisarios que se reparten entre el Senado y la Cámara de Representantes. Este número de compromisarios o votos electorales se reparten por los 50 estados del país donde se eligen a 435 congresistas de la Cámara de Representantes más el Distrito de Columbia al que le corresponde 3. En esta Cámara baja del país, los republicanos tienen la mayoría (246 frente a 188) y, según todas las encuestas parece que la mantendrán.

El objetivo de cada candidato es alcanzar una cifra mágica: 270. A cada estado le corresponde un número de votos electorales en proporción a su número de habitantes de cada estado. Con mayor número en juego están: California (55), Texas (38), Florida y Nueva York (29), Pensilvania e Illinois (20) u Ohio (18). Los estados otorgan sus votos electorales al aspirante que se adjudica la mayoría de los voto de los ciudadanos, también conocido, como voto popular. Las excepciones son Maine y Nebraska, que reparten los votos del Colegio Electoral mediante un sistema de representación proporcional.

Este 8 de noviembre están en juego 34 senadores, de los cuáles 24 son republicanos y 10 demócratas

Los otros 100 compromisarios restantes corresponden al Senado. Cada estado elige dos senadores, los cuáles se renuevan por tercios cada dos años. Por lo tanto, este 8 de noviembre están en juego 34 senadores, de los cuáles en esta ocasión 24 son republicanos y 10 demócratas.

El partido que representa Trump es el que más se juega en la Cámara Alta. En estos momentos, los republicanos poseen 54 escaños frente a los 44 de los demócratas. Los dos restantes corresponden a representantes independientes. Si el partido de Clinton mantuviese a sus diez senadores y se hiciera con cinco más, el Senado les pertenecería. Aunque según la web especializada FiveThirtyEight, existe un empate en las cinco carreras que decidirán si los demócratas arrebatan el control a los republicanos.

Según calcula la web RealClearPolitics, la representante del partido demócrata tiene en su bolsillo 220 votos electorales frente a los 180 del republicano. Por ello, la batalla por los estados indecisos ('swing states') será clave, sobre todo, Florida, Ohio y Carolina del Norte.

En España se conocerán los primeros resultados en torno a la 1 de la mañana, puesto que a partir de esa hora la costa Este, donde se sitúan los 'swing states' más relevantes, comenzará a emitir sus escrutinios. Y a lo largo de esta madrugada del 8 al 9 de noviembre comenzarán a diluirse los resultados. A las 5 de la mañana la palabra de los estados de la costa Oeste serán los encargados de ofrecer un resultado oficial.

De aquí saldrá el ganador de la noche electoral. Pero no será hasta el segundo miércoles de diciembre, en esta ocasión el día 19 de diciembre, cuando los compromisarios se reúnan en los parlamentos estatales para dar su voto oficial para elegir al presidente y al vicepresidente. Los estados tras ello los votos certificados al Senado.

Todo ello teniendo en cuenta que alguno de los candidatos alcance los 270 votos electorales. Aunque es poco probable, puede que en un escenario electoral tan extraño como el que existe en Estados Unidos en 2016 se produzca un empate a 269, por la aparición de partidos alternativos. En ese caso, la Cámara de Representantes de EEUU decidiría el futuro del país con sus 50 votos, uno por cada Estado. Pero en este escenario los republicanos controlan 33 delegaciones de la cámara y los demócratas solo 14.

ELECCIONES MUNICIPALES Y LOCALES

Como señala Hispanic Council, este 8 de noviembre los comicios van más allá que la elección nacional. A escala estatal se eligen 12 gobernadores, 9 vicegobernadores, 10 fiscales y 62 cargos estatales. Por otro lado, 46 de las 100 ciudades más importantes de Estados Unidos celebran elecciones municipales: 25 de ellas eligen alcaldes y concejales, 20 sólo eligen concejales, 1 solo elige alcalde.

Además de los cargos electos, este martes también se votan 163 propuestas y leyes estatales que afectan a gran parte de la población. Destaca el voto de ciertas leyes como: la legalización de la marihuana (California, Massachusetts, Maine, Arizona y Nevada), el control de armas (California, Maine, Nevada y Washington), el salario mínimo (Arizona, Colorado, Maine y Washington. En Dakota habrá un referéndum para reducir el salario mínimo juvenil).

Otros temas controvertidos, como un nuevo sistema de votación en Maine o la prohibición del uso de las bolsas de plástico en California, también serán consultados, así como una votación sobre la obligación del uso del condón en la industria de la pornografía. Otras votaciones sobre salud pública se realizarán en Colorado, Nevada y Washington. Todo esto supondrá que, más allá de que Clinton o Trump lleven el timón a nivel nacional, Estados Unidos amanecerá el 9 de noviembre con un nuevo rumbo.