El debate de los candidatos europeos se convierte en una bronca sobre Cataluña
Montserrat tilda al indpendentismo de "anomalía democrática" y Borrell defiende a Garicano de la acusación de ser de extrema derecha
Actualizado : 07:37
El debate entre candidatos a las elecciones europeas en TVE se ha convertido en un bronco enfrentamiento sobre Cataluña y la situación de los políticos presos y los huidos. Este asunto ha salpicado todo el debate a lo largo de los tres bloques en que se ha dividido: social, económico y retos europeos.
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Ya ha comenzado con un encontronazo entre los candidatos de las listas independentistas catalanas con los representantes constitucionalistas, después de que tanto Gorka Knörr, candidato en la lista de Carles Puigdemont, como Jordi Solé, de ERC, hayan aprovechado sus intervenciones iniciales para reivindicar a quienes consideran "presos políticos".
A ambos les han respondido, en turnos sucesivos, el candidato de Ciudadanos, Luis Garicano; el socialista Josep Borrell y la 'popular' Dolors Montserrat, que han replicado que en España no hay presos políticos, que Puigdemont es "un fugado de la Justicia", en palabras de Borrell, y que son los separatistas quienes son una "anomalía democrática", según Montserrat.
La única candidata que no ha entrado en la polémica ha sido la de Podemos, María Eugenia Rodríguez Palop, quien se ha quejado de que se consuma el tiempo del debate en hablar de otras cosas que no sea de Europa.
Mientras que la candidata del PNV ha intervenido para defender un nacionalismo "moderno" como el del su partido: "Europa necesita un nacionalismo como el del PNV", ha exclamado para acto seguido apostar por que el conflicto catalán se resuelva con diálogo y para defender la euroorden tal y como está.
Knörr, que ha sido el primero en hablar, ha empezado diciendo que "quien debería estar en este debate es el presidente Puigdemont", que sus derechos civiles "están siendo violados" y que el Estado español "es una vergüenza en Europa" por la existencia de "presos políticos".
"Hoy aquí debería estar el preso político Oriol Junqueras", ha dicho en su turno Jordi Solé, quien ha apostado por una UE que "frene a la extrema derecha y los nacionalismos de Estado" y que "nunca más haya una Europa que mire para otro lado cuando dentro de la unión se apalea indignamente a votantes indefensos o se manda a la cárcel y al exilio" a líderes políticos.
El de Vox, Jorge Buxadé, ha pedido que el debate "no se convierta en un mitin sobre un señor que debería haber sido entregado a España y juzgado por el Supremo".
Garicano ha respondido a los independentistas que Europa no es división y acciones unilaterales, sino que es un proyecto sin ejército cuya base es la ley y la negociación de acuerdos.
"En Europa uno no puede operar unilateralmente", ha dicho, "Europa es hablar dentro de la ley". De paso, ha recordado la propuesta de Ciudadanos de reformar la euroorden para que no se repitan casos como el de Puigdemont que está "abusando del espacio de libre circulación".
BORRELL SALE EN DEFENSA DE GARICANO
Knörr le ha acusado entonces de tener un "discurso clásico de extrema derecha" mientras su partido tiene "acuerdos con Vox". El 'naranja' le ha respondido que ellos son "los únicos de extrema derecha porque son los que han hablado de diferencias étnicas".
Borrell, en su siguiente turno, ha dicho que ya están acostumbrados a que todo el que no está a favor de la independencia sea tildado de ser de extrema derecha. "Se puede perfectamente estar en contra de la extrema derecha y ser normal en los planteamientos ideológicos", ha señalado.
Es más, ha añadido que no cree que su "amigo Luis sea de extrema derecha", como tampoco lo es él y está "radicalmente en contra" del independentismo. "En España no hay presos políticos y el señor Puigdemont no es un exiliado, es un fugado de la Justicia", ha remachado.
Pero el candidato de Lliures por Europa/Junts ha vuelto a insistir en su defensa de Puigdemont y del resto de huidos de la Justicia española como "exiliados políticos" que "se mueven con toda libertad por 12 Estados". En su opinión, "esa es la realidad aunque a algunos no les guste".
"Como decía un filósofo del PP, un vaso es un vaso, un plato es un plato, un preso político es un preso político y un exiliado político es un exiliado político", ha espetado.
La candidata del PP ha cargado duramente contra lo que considera una "anomalía democrática" que son los "separatistas catalanes", que "dieron un golpe de Estado" y son la "amenaza de la libertad" y quieren acabar con Unión Europea. Y refiriéndose al candidato de Compromís, Jordi Sebastiá, le ha espetado que el nacionalismo es "pobreza económica, conflicto social y desprestigio de las instituciones". Este se ha defendido advirtiendo a la del PP que no puede dar lecciones un partido que ha pactado con VOX.
Sin embargo, la acusación de Montserrat de que los nacionalismos atentan contra la UE se ha visto refrendada por Borrell, quien ha afirmado que Europa se está viendo amenazada por los "resurgir de los nacionalismos" y ha puesto como ejemplo de ello el Bréxit y a los independentistas catalanes.
El candidato de Vox, Jorge Buxadé, ha espetado a los representantes de los partidos independentistas que no va aceptar lecciones de democracia de quien ha dado un golpe de Estado y porque además, él mismo ha sido agredido por los CDR violentos. Esto, después de que el candidato de ERC, Jordi Solé, le haya recriminado las muertes que han producido en Europa los totalitarismos.
"COALICIONES TRAMPA"
Luis Garicano se ha defendido de las acusaciones que le han lanzado los independentistas de haber acudido a las últimas europeas con grupos de extrema derecha, acusando a los nacionalistas españoles de presentarse en "coaliciones trampa" para ocultar a los ciudadanos quiénes son los verdaderos partidos que están detrás de ellas.
Ha puesto como ejemplo que los gallegos no saben que están votando a Bildu con la coalición en la que va el BNG y también ha acusado al PNV de ir en una "coalición trampa" escondiendo su presencia en la lista de Coalición Canaria. "Piden el voto para ir a Europa a manchar el nombre de España", ha exclamado antes de anunciar que Ciudadanos propondrá modificar la Ley Electoral para evitar que estas coaliciones sean posibles.
La candidata del PNV le ha respondido que no les queda más remedio que ir en coalición para intentar llegar a Europa por culpa, ha dicho, del "déficit democrático del Estado".
LAS EMPRESAS DE CATALUÑA PIDEN AYUDA
En el bloque dedicado a la economía, de nuevo el problema catalán ha ocupado parte de las intervenciones. Borrell ha afirmado que el 'procés' ha provocado "graves daños" a la economía catalana, además de que 3.500 empresas se marcharon de Cataluña en torno al 1-O, "un récord mundial" que ha adjudicado al independentismo.
Solé ha intercedido asegurando que hubo presiones a muchas empresas para que se fueran, momento en el que le ha interrumpido Garicano para asegurar que fue al revés: una firma, cuyo nombre no ha querido dar, llegó a llamar al Gobierno según el candidato de Ciudadanos para reclamar un cambio en la ley "para poder irse".
El ministro ha dicho también que una empresa solicitó ayuda porque estaba en riesgo "su viabilidad financiera" y ha calificado de "propaganda" que se hable de presión a las empresas.
El debate ha vuelto varias veces al problema catalán incluso cuando se hablaba de política fiscal y monetaria. Knörr ha advertido de que "el mayor enemigo del euro es la creciente deuda de países como Italia y como España" y ha opinado que "el euro necesita de Estados pequeños y viables, como podría ser Cataluña" o de grandes Estados federales como Alemania.
Cuando le ha tocado el turno a Borrell, ha lamentado la "fobia antiespañola que rezuman algunos" y le ha reprochado que piense "que España es un país no adecuado para el euro y una hipotética Cataluña sí". Knörr, sin embargo, ha negado haber dicho eso.