Cifuentes, preocupada por una posible 'vendetta' de su número 7
- Álvaro Ballarín tiene previsto recoger su acta de diputado y será decisivo en la investidura
- El edil por Moncloa podría estar preparando una 'venganza' por el trato recibido estos días
- El número siete del PP a la Comunidad de Madrid fue desimputado tras las elecciones
Actualizado : 10:22
Cristina Cifuentes y su equipo están preocupados por lo que pueda hacer Álvaro Ballarín en los próximos días. En el PP de Madrid temen que el número 7 de la lista del PP a la Comunidad de Madrid esté preparando una 'vendetta' por el trato recibido tras saltar la noticia de su imputación, aunque después de las elecciones se archivó la causa contra él. El edil por Moncloa parece haber recibido numerosas presiones para no recoger su acta de diputado, pero todo apunta a que ocupará su escaño. ¿Habrá un nuevo 'tamayazo'?
Ese es el temor que se ha instalado en el PP de Madrid en los últimos días. En el partido prefieren que Ballarín se retire y no recoja su acta de diputado de la Asamblea regional la semana que viene, sobre todo porque ello allanaría el camino hacia la Presidencia de la Comunidad a Cristina Cifuentes y terminaría con los 'peros' que está poniendo Ciudadanos a la hora de apoyar a la candidata 'popular' en la investidura.
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No obstante, informa Vozpopuli, parece que Ballarín no está dispuesto a irse por su propia voluntad, sino que tiene previsto ocupar su escaño. Allí su voto será decisivo para la investidura, y Cifuentes no podrá hacer otra cosa más que esperar a recibir su apoyo. Sin embargo, en el partido la inquietud es la nota predominante estos días, ya que se teme que se pueda producir un nuevo 'tamayazo', aunque esta vez no beneficiaría al PP.
Ballarín no está dispuesto a irse por su propia voluntad y tiene previsto ocupar su escaño
Hay que recordar que en 2003 Esperanza Aguirre se convirtió en presidenta de la Comunidad de Madrid después de que dos diputados socialistas, Eduardo Tamayo y Maria Teresa Sáenz, se ausentaran de la Asamblea de Madrid para no votar, impidiendo así la investidura del cabeza de lista del PSOE Rafael Simancas. Eso impidió formar gobierno, y hubo que convocar unas segundas elecciones en octubre que acabó por ganar la candidata del PP.
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Ahora se teme que Ballarín pueda hacer algo parecido, sobre todo porque a él corresponde tomar la decisión de quedarse o irse. Cifuentes no puede hacer mucho en ese sentido, sólo hablar con su compañero y sugerirle que se marche por el bien del PP. Se rumorea que ya lo ha hecho, sobre todo porque el edil por Moncloa ocultó sus problemas judiciales -el día de las elecciones todavía estaba imputado y la exdelegada del Gobierno en Madrid había prometido que no llevaría imputados en su lista-, pero lejos de apartarse Ballarín parece dispuesto a seguir adelante para “defender su honor” ya que “dice que es inocente”, dicen fuentes del partido citadas por el mencionado digital.
Bolsamanía ha intentado ponerse en contacto con el equipo de Cifuentes para preguntar por esta cuestión, pero aún no ha recibido respuesta.
CÓDIGO ÉTICO
La propia Cifuentes ha insistido este miércoles, en una entrevista en Telecinco, en que “la lista la hizo el PP, pero la asumo como propia”, y ha remarcado que en ella hay “muchos compañeros” y que está “convencida de su honestidad y buen hacer”. Además, ha recordado que todos y cada uno de los miembros de su lista, empezando por ella misma, firmaron el “código ético” que se elaboró para que actuase como cortafuegos contra la corrupción, y en el que se dice que no podrá haber imputados en las listas. Precisamente, Ballarín ayudó a elaborar este reglamento.
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Cifuentes: “La lista la hizo el PP, pero la asumo como propia”
No obstante, ni Cifuentes ni el PP podrían hacer nada para echar a Ballarín en caso de nuevas imputaciones. Aunque la exdelegada del Gobierno ha insistido en que todos los miembros de la lista han suscrito el mencionado código ético, lo cierto es que el acta de cada diputado es personal. De esta forma, si Ballarín o cualquier otro diputado resultam imputados, podrán quedarse en el cargo a pesar de lo firmado.
Ante esta situación, el mayor problema de Cifuentes es contar entre los diputados populares de la Asamblea de Madrid con un compañero en el que ya no confía, pese a la estrecha relación que les une desde hace años, y que puede provocar que Ciudadanos opte por no apoyar su investidura. Y el temor a perder la Presidencia de la Comunidad es más grande si cabe ya que en los últimos días el cabeza de lista de la formación naranja, Ignacio Aguado, ha iniciado conversaciones con el socialista Ángel Gabilondo.
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