Wall Street se hunde hasta nuevos mínimos tras su semana más bajista en 10 años

Wall Street ha vuelto a caer con fuerza este viernes (Dow Jones: -1,81%; Nasdaq: -2,99%; S&P 500: -2,06%) y ha profundizado en sus mínimos anuales tras el mensaje lanzado por la Reserva Federal de EEUU (Fed) este miércoles. Los índices estadounidenses han protagonizado su peor semana en 10 años. En concreto, el Dow Jones y el S&P 500 han caído un 7%, mientras que el Nasdaq ha perdido un 8% desde el lunes.

El índice tecnológico acumula un desplome superior al 22% desde su récord del pasado 3 de octubre. Por ello, puede decirse que ha entrado en mercado bajista (bear market), una expresión que se utiliza para cualquier activo que cae más de un 20% desde su último máximo.

Valores como Facebook (-6,33%), Netflix (-5,45%), Amazon (-5,71%) y Alphabet (-3,16%), matriz de Google, acumulan descensos aún más pronunciados desde sus últimos récords, lo que evidencia que las 'manos fuertes' están deshaciendo posiciones a marchas forzadas en los valores que más habían subido en los últimos meses.

LOS MENSAJES DE LA FED

La Fed decidió seguir adelante con la cuarta subida de los intereses de 2018 (la novena desde que comenzó el ciclo de subidas en 2015), que ha elevado los intereses hasta el 2,25%-2,50%, justo la parte baja de la horquilla del 2,5% al 3,5% y que el banco central considera neutral para los tipos (es decir, no estimulan pero tampoco restringen la actividad económica).

Además, el comunicado fue más agresivo de lo previsto. Muchos analistas anticipaban que la referencia a la necesidad de “subidas graduales de los intereses” iba a ser eliminada y sustituida por alguna referencia más explícita a la evolución de los datos económicos.

Sin embargo, el único cambio fue incluir por delante que serán necesarios “algunas subidas graduales de los intereses” si los datos económicos lo justifican. "Por primera vez desde 2008, los tipos de interés son más altos que la inflación subyacente y están apenas por debajo del rango de las estimaciones de los miembros de la Fed sobre la tasa de largo plazo (2,5% a 35%)", afirman los expertos de Berenberg. "Después de diez años de una política muy acomodaticia, la Fed finalmente se está acercando a una posición neutral", añaden.

LA REDUCCIÓN DEL BALANCE

Y por último, el mercado aumentó de manera significativa su caída cuando Powell comentó en rueda de prensa que la Fed mantenía en modo “piloto automático” la reducción de su balance, que en 2019 adelgazará en 600.000 millones de dólares.

Un estudio de la Reserva Federal de Boston ha calculado que esta retirada de liquidez, nunca antes realizada en la historia porque nunca antes se había inyectado tanta liquidez al sistema como tras la crisis de 2008, equivale a tres subidas de tipos al analizar su impacto en las condiciones financieras de EEUU.

Los inversores han comenzado a percibir que, además de reducir las subidas de tipos, la Fed debería reducir el ritmo de adelgazamiento de su balance para no afectar al crecimiento económico. El mercado teme que este endurecimiento monetario y la retirada de liquidez, junto a las tensiones comerciales con China y el final del impacto positivo de las rebajas de impuestos, terminen provocando un brusco frenazo económico.

Desde Berenberg, destacan que la Fed "no ha realizado ninguna mención sobre el objetivo para el tamaño final de su balance", que actualmente se encuentra en 3,9 billones de dólares. Estos analistas destacan que "la política sobre el balance centrará la atención en mayor medida el próximo año porque la Fed reevaluará su marco operativo".

EMPRESAS

A nivel empresarial, el claro ganador de la sesión es Nike, que se ha disparado un 7,17% en el Dow Jones tras presentar unos resultados trimestrales que han sido muy bien recibidos por el mercado. Sin embargo, ha sido una jornada en la que han predominado las pérdidas, con Goldman Sachs (-4,98%) como la compañía más castigada, seguida de American Express (-4,62%) y Apple (-3,89%)

DATOS ECONÓMICOS Y OTROS MERCADOS

En el frente de datos macroeconómicos, el PIB del tercer trimestre se ha revisado ligeramente a la baja en EEUU hasta el 3,4% desde el 3,5%, aunque lo que preocupa a los inversores es un frenazo económico mayor de lo esperado durante 2019.

En este sentido, los pedidos de bienes duraderos del mes de noviembre subieron un 0,8%, la mitad de lo esperado. Excluyendo la partida más volátil de Automóviles, los pedidos bajaron un 0,3%, frente a la subida esperada del 0,2%.

Por su parte, en el mercado de materias primas, el petróleo cede terreno. El barril West Texas, referencia en EEUU, cae un 0,55%, hasta los 45,33 dólares. En el mercado de divisas, el euro se deprecia, hasta 1,1360 dólares. Y en el mercado de deuda, el diferencial entre los rendimientos de los bonos a 10 y 2 años se sitúan en 14 puntos básicos.

Los inversores temen que este diferencial se invierta a favor del bono a 2 años, un hecho que ha anticipado las últimas recesiones en EEUU y que preocupa al mercado, pese a que la Fed ha comentado que esta vez será diferente.

Por último, los expertos de Link Securities destacan que "esta noche con casi toda probabilidad parte del Gobierno Federal estadounidense tendrá que cerrar por falta de financiación", lo cual tampoco es positivo para el sentimiento del mercado.