Economía.- Gescooperativo renueva su imagen e impulsa un plan para alcanzar los 10.000 millones en patrimonio gestionado
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
Gescooperativo, la sociedad de inversión colectiva del Grupo Caja Rural, se ha dotado de una nueva imagen corporativa que incorpora el símbolo de la espiga de grupo, con el objetivo de reforzar en el mercado su vinculación con esta institución financiera, según ha informado a través de una nota de prensa.
Esta nueva marca también sirve como distintivo de una nueva etapa de crecimiento de la sociedad de inversión, que se plantea como objetivo alcanzar un patrimonio superior a los 10.000 millones de euros bajo gestión en el horizonte de los próximos cuatro años.
Actualmente, Gescooperativo gestiona un patrimonio de 7.309 millones de euros (a 31 de enero de enero de 2023), lo que representa un incremento superior al 19% en los últimos 13 meses y la sitúa en el puesto noveno del ranking de fondos. Además, la sociedad aumentó prácticamente en idénticos términos el número de partícipes, que se eleva en este momento a 326.000.
APUESTA POR EL CRECIMIENTO ORGÁNICO
Gescooperativo tiene previsto seguir apostando por una estrategia de crecimiento orgánico, y para ello potenciará en los próximos años la venta de productos a la banca privada y ampliará su gama de fondos, especialmente dentro del segmento de fondos sostenibles.
Para el presente ejercicio, su estrategia de crecimiento se apoyará sobre dos ejes principales: el lanzamiento de fondos garantizados de rendimiento fijo y el impulso de la gama de fondos mixtos con una alta exposición de la cartera a mercados globales.
Gescooperativo gestiona actualmente 56 fondos y tiene una cuota de mercado del 2,31%. Su patrimonio se distribuye en fondos de inversión mixtos de renta fija (35%), fondos garantizados (29%), fondos mixtos de renta variable (23%), fondos de renta fija (7%) y fondos de renta variable (6%).
UNA NUEVA MARCA PARA LIDERAR EL CRECIMIENTO
La nueva imagen de marca de Gescooperativo incorpora como elemento identificativo principal la espiga característica de Caja Rural con el fin de reforzar su reconocimiento y dejar patente su vinculación corporativa con este Grupo financiero.
La espiga del Grupo Caja Rural fue diseñada en 1979 por el diseñador croata Ante Kvessitch para la Caja Rural de Albacete, y muy pronto fue adoptada al resto de cajas rurales de España.
En su actual configuración se ha querido dotar a este símbolo de un estilo más moderno y digital. En concreto, se han minimizado sus detalles para su correcta visualización en todo tipo de formatos y a través de cualquier canal.