La Fiscalía de Brasil denuncia ante el Tribunal Supremo a Michel Temer por corrupción pasiva

El procurador general de Brasil, Rodrigo Janot, ha presentado este lunes ante el Tribunal Supremo Federal (TSF) una denuncia contra el presidente, Michel Temer, y contra el exdiputado del Partido de Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) Rodrigo Rocha Loures por un delito de corrupción pasiva. Inmediatamente después de conocer la noticia,Temer se ha reunido con sus hombres de confianza para preparar la respuesta política y jurídica a la denuncia del procurador general.

Con esta denuncia, recogida por el portal G1 de O Globo, queda formalizada la acusación contra el mandatario, que ahora juzgará el Supremo si cuenta con la autorización de la Cámara de los Diputados. Temer también está siendo investigado por obstrucción a la Justicia y por participación en organización criminal, delitos para los cuales la fiscalía todavía no ha presentado ninguna denuncia.

Temer ya prepara un plan que permita amortiguar el impacto político de esta denuncia

Temer ha convocado en el Palacio de Planalto en horas de la madrugada al Abogado General de la Unión, Grace Mendonça, a su equipo de abogados privados, al secretario general de la Presidencia, Moreira Franco, y a los líderes de la base aliada del Gobierno en la Cámara de Diputados y el Senado.

El objetivo, según informa la prensa brasileña, es elaborar un plan que permita amortiguar el impacto político de esta denuncia. Para conseguirlo, la respuesta vendrá de su gabinete jurídico y el Gobierno seguirá con la agenda prevista.

LAS INVESTIGACIONES

La petición de la Fiscalía llega una semana después de que la Policía Federal entregara a un juez la mayor parte de su investigación sobre las acusaciones por la presunta entrega de sobornos al presidente, Michel Temer, por parte de JBS. El documento es un paso importante en la investigación, que ha llevado al fiscal federal a presentar cargos de corrupción contra el mandatario. Temer ha afirmado en numerosas ocasiones que es inocente.

Las acusaciones contra Temer se basan en un acuerdo de culpabilidad de ejecutivos de JBS, quienes han asegurado que pagaron a Temer al menos 4,6 millones de dólares (unos 4,1 millones de euros) en sobornos desde 2010 para obtener contratos públicos, resolver disputas tributarias y pedir préstamos al Banco de Desarrollo estatal.

Ejecutivos de JBS han indicado que pagaron cerca de 154 millones de dólares (cerca de 138,3 millones de euros) a cerca de 1.900 políticos durante la última década, periodo en el que la empresa pasó de ser un pequeño productor local de carne a convertirse en un gigante global.

CONGELACIÓN DE ACTIVOS DE JBS

Además, la Fiscalía General de Brasil solicitó la semana pasada la congelación de los activos de la empresa JBS y de sus accionistas mayoritarios, al hilo del escándalo de corrupción que afecta al Gobierno y a la compañía.

La Fiscalía reclamó al Tribunal de Cuentas que se garantice el reembolso de unos 850 millones de reales (cerca de 228 millones de euros) por los perjuicios que sufrió el banco estatal BNDES por sus acuerdos con JBS.