El chalet de Iglesias y Montero: la campaña en su contra les hará vencer

Los actuales líderes de Podemos, Pablo Iglesias y su pareja, Irene Montero, están convencidos de su continuidad al frente de la formación. Su argumento es que la campaña mediática en su contra ha movilizado a sus militantes a su favor y están dispuestos a tragarse el sapo del chalet de 615.000 euros. De hecho, la web se ha caído en varios momentos por la avalancha de votantes en el referéndum.

Así lo aseguran fuentes del entorno de la pareja: "Parece que la gente se está animando a votar a su favor con la campaña mediática en su contra, los escraches en el chalet, etc. Todo esto da credibilidad a su argumento de que son víctimas de una conspiración desde las cloacas del Estado para tapar la porquería del PP. Y encima se encuentran con los regalos de Zaplana y la sentencia de la Gürtel".

"Es el victimismo habitual, que va a conseguir que los militantes cierren filas con el líder y se 'traguen el sapo' de que se haya comprado un chalet en una de las zonas más pijas de Madrid por 615.000 euros... después de haber criticado que otros políticos hicieran lo mismo y de haber prometido que seguiría viviendo en Vallecas si llegaba a la Moncloa", añade otra.

Es decir, la agresiva campaña de los medios de la derecha en contra de los líderes de Podemos puede tener el efecto contrario al supuestamente deseado: en vez de lograr descabalgar a Iglesias, va a permitir su victoria en el pleibiscito de esta semana y que, además, salga reforzado. Al menos es lo que espera la cúpula del partido morado.

Además, Iglesias y Montero tienen la ventaja de que nadie en Podemos ha pedido el voto en su contra. Los que no transigen con el caso de la mansión, como los anticapitalistas o el alcalde de Cádiz, por considerarlo contrario a la ética del partido, han preferido desvincularse de la consulta en vez de hacer campaña por el no. La adhesión de Íñigo Errejón es la prueba definitiva de este cierre de filas.

Y, al final, tampoco hay un baremo para medir la victoria o la derrota. Simplemente, que apoyen a Iglesias y Montero la "mayoría" de los militantes inscritos. ¿Y cuánto es esa mayoría? No se sabe, por lo que los líderes pueden situarla donde quieran. Algunos medios hablan del 80% de los votantes, pero lo importante es la participación. A partir del 35% sería suficiente, según las fuentes.

En todo caso, parece que ese porcentaje se va a superar con creces debido a esta movilización. Otros cargos de Podemos aseguran que la web para votar se ha caído en varias ocasiones debido a la avalancha de visitas. Todo lo cual hace presagiar que la pareja de la hipoteca misteriosa lo tiene todo atado y bien atado.