Cuidado con los viajes en avión, puedes gastarte cuatro veces más
La comida cuesta un 380% más y los Duty Free pueden ser un 41% más caros
Al planear las vacaciones de verano, siempre intentamos buscar la manera de poder ahorrarnos el máximo dinero posible. Si además decidimos realizar nuestro viaje en avión, intentamos que el precio del billete sea el más barato. Sin embargo, no tenemos en cuenta los gastos extra con los que nos podemos encontrar. Comprar en los Duty Free puede encarecer el gasto hasta un 41% y comer en el avión cuesta cuatro veces más.
Quién no ha aprovechado alguna vez el tiempo de espera en el aeropuerto para comprar en los Duty Free con la excusa de ahorrarse los impuestos. Pero quizá esta idea no es del todo cierta. "Al contrario de la creencia popular, comprar en el Duty Free no sale tan barato como pensamos, es más, en muchas ocasiones es más caro", asegura un reciente estudio elaborado por el comparador de precios idealo.es.
Los perfumes pueden encontrarse en los comercios 'online' hasta un 41% más baratos que en los Duty Free
Los consumidores pueden llegar a ahorrarse hasta un 41% si en lugar de comprar determinados productos en estas tiendan lo hacen por internet. En concreto los perfumes, uno de los artículos más populares dentro de los Duty Free aeroportuarios, que pueden encontrarse en los comercios 'online' hasta un 41% más baratos, en el caso de los dirigidos al público masculino, y un 28% en cuanto a los femeninos.
Otro de los productos más demandado son las bebidas alcohólicas, cuyo precio es de media un 9% más caro en los establecimientos del aeropuerto, según este estudio. En concreto, en el caso de los vinos espumosos, como el champagne o el cava, el consumidor puede llegar a ahorrarse hasta un 16% si escoge la web como medio de compra. Mientras que el whisky tiende a ser hasta un 13% más barato por internet, o un 10% en el caso de los licores.
Sin embargo, sí que hay un tipo de bebida que podría compensar adquirir en una tienda del aeropuerto: las marcas más populares de vodka, ron o ginebra, puesto que su compra 'online' supondría que los consumidores tendrían que pagar un 5% más.
Si estos datos nos convencen para dejar de comprar en los Duty Free, ya hay aerolíneas que permiten comprar por internet y que podamos recoger el producto al acceder al avión. Es el caso de AirEuropa. Con este servicio, el pasajero puede reservar sus productos hasta tres días antes de la salida del vuelo, recogerlos en su asiento y pagarlos a bordo. Además, este método de compra tiene un 20% de descuento adicional en todos los artículos .
COMER EN EL AVIÓN CUESTA CUATRO VECES MÁS
Que los precios de los productos que podemos consumir en un avión son siempre algo más caros es algo que la mayoría de la población conoce. De hecho, más de la mitad, un 55% según un estudio de Kayak, está dispuesto a gastarse más dinero en comida cuando viajan. Lo que quizá no tantos conocen es que los precios a bordo son de media un 380% más elevados en comparación con los supermercados. Es decir, que si decidimos comer durante nuestro viaje, el vuelo nos puede salir cuatro veces más caro.
Un simple cruasán puede alcanzar un precio hasta un 400% superior que en un supermercado
Pero los datos son todavía más claros si los trasladamos a algunos alimentos concretos. Por ejemplo, un simple cruasán puede alcanzar un precio hasta un 400% superior que en un supermercado y una chocolatina puede tener aumento de un 203% en algunas aerolíneas. En el caso de las bebidas, por una botella de agua mineral pueden cobrarnos un 1.132% por encima de su precio en un supermercado y el triple que en cualquier tienda de un aeropuerto de España. Eso teniendo en cuenta que desde el pasado mes de marzo, Aena obliga vender las botellas de agua pequeñas al precio máximo de un euro.
Los aperitivos tampoco escapan a estas subidas y una lata de cerveza puede costar más de un 150% que en uno de los establecimientos del aeropuerto, mientras que una copa de vino aumenta su precio un 60%. Si a esto queremos añadirle algo de acompañamiento, hay que tener en cuenta que un simple paquete de aceitunas cuesta el doble que en el supermercado y unos cacahuetes experimentan un aumento de casi el 300%.