El secreto de sumario de BBVA-Villarejo no se levantará hasta declarar todos los imputados

La causa penal que investiga la relación entre BBVA y Grupo Cenyt, la empresa del excomisario de Policía José Manuel Villarejo, cumple ya diez meses activa, pero el secreto de sumario que pesa sobre ella sigue sin levantarse. No lo hará hasta que pasen por delante del juez todos los imputados, y aún quedan, al menos, dos por ser escuchados.

En una causa como esta, impera la lógica de que todos los imputados puedan declarar en igualdad de condiciones, según explican fuentes jurídicas. Es decir, que si unos lo han hecho sin conocer de qué información disponen el juez y los fiscales en su contra, el resto también debería hacerlo. Por ello, hasta que no se presenten todos ante el juez ni este ni los fiscales se plantearán levantar el secreto de sumario.

Por el momento, están pendientes de presentarse ante el juez BBVA, que debe terminar su declaración, y el exresponsable de servicios jurídicos de la entidad José Manuel García Crespo, cuya comparecencia estaba fechada para el martes, pero se suspendió al encontrarse él de viaje.

Eso sin tener en cuenta los posibles nuevos imputados a los que decida citar el juez, una opción posible a pesar de que ya lleven esa etiqueta 14 directivos y exdirectivos del banco, entre los que se encuentra Francisco González.

El hecho de que la causa se encuentre bajo secreto de sumario ha llevado a la mayoría de los imputados a acogerse a su derecho a no declarar. De hecho, solamente han querido responder al juez y los fiscales el expresidente de Distrito Castellana Norte y exdirectivo de BBVA Antonio Béjar, que ha comparecido en varias ocasiones, el expresidente del banco Francisco González y el propio banco.

BBVA, a quien representa en la causa Adolfo Fraguas, director de Servicios Jurídicos de la entidad en España, se desmarca así de la tendencia seguida estas semanas por sus propios directivos. Todos los empleados del banco imputados, sin excepción, incluido Juan Asúa, asesor del actual presidente, Carlos Torres, han guardado silencio.

UNA DECLARACIÓN INTERRUMPIDA

La declaración de BBVA tuvo lugar el miércoles, pero por partes. Comenzó a las 9,30 horas y celebró un receso en torno a las 12 horas. Sin embargo, no se retomó a los pocos minutos, como es habitual en estas situaciones. De hecho, no se reanudó hasta la tarde, pues el juez tuvo que atender otro asunto de actualidad del que está a cargo.

El juez tuvo que interrumpir la declaración en dos ocasiones para atender otros casos

Se trata del caso de los CDR, que también es responsabilidad de Manuel García Castellón, el magistrado del caso Tándem. El miércoles debía resolver sobre la prisión provisional de los cuatro CDR encausados después de que la Sala de lo Penal decidiera anular la decisión de García Castellón de enviar a prisión a cuatro detenidos el pasado mes de septiembre. Finalmente, ha decidido enviarlos de nuevo a prisión incondicional.

Ambas causas se entrelazaron el miércoles, lo que llevó a que no fuera posible culminar el interrogatorio a BBVA a partir de las 18 horas, cuando el juez se vio obligado a interrumpir de nuevo la declaración del banco. El interrogatorio se reanudará, previsiblemente, la próxima semana.