Moody's aumenta la presión sobre Grifols y sitúa su 'rating' en revisión para una rebaja
Tras presentar un flujo de caja libre por debajo de lo previsto y unas cuentas no auditadas
Moody's eleva la presión sobre Grifols y coloca su calificación y la de sus filiales en revisión para una rebaja. Entre ellas se incluye el rating de familia corporativa (CFR) de 'B2' de Grifols, el de probabilidad de incumplimiento (PDR) de 'B2-PD', el rating senior no garantizado 'Caa1', el rating senior garantizado respaldado de 'Ba3' y el rating senior garantizado. La perspectiva, por su parte, es negativa.
Asimismo, están incluidos los ratings senior no garantizados respaldados por 'Caa1' de Grifols Escrow Issuer, SAU y los ratings senior garantizados respaldados por 'Ba3' de Grifols World Wide Operations Ltd. y Grifols World Wide Operations USA, Inc.
La agencia explica que toma esta decisión tras los resultados de Grifols, que han mostrado una generación de flujo de caja libre (FCF) más débil en 2023-24 de lo que Moody's había proyectado, así como por el retraso en la publicación de sus cuentas auditadas.
También porque la farmacéutica catalana todavía "no ha abordado" los próximos vencimientos de deuda, incluidos dos bonos con vencimiento en febrero de 2025 y mayo de 2025 y una línea de crédito revolving (RCF) de 1.000 millones de dólares con vencimiento en noviembre de 2025.
"Si bien Grifols ha confirmado que el proceso de venta de una participación del 20% en Shanghai RAAS (SRAAS) está en marcha, tras la conclusión satisfactoria de la due diligence confirmatoria por parte del comprador de la participación, la finalización en plazo de esta transacción y del posterior reembolso/refinanciación de sus vencimientos de deuda para 2025 todavía implica riesgos de ejecución", indica Moody's.
Otra de las razones que la calificadora esgrime para llevar a cabo su decisión son las consideraciones de gobierno corporativo, "en particular las relacionadas con la gestión de riesgos de Grifols, la previsibilidad de los resultados financieros y la complejidad organizativa".
"En 2023, Grifols siguió registrando una generación de FCF negativa y la compañía se encaminó hacia un FCF de equilibrio en 2024. Esto es inferior a las expectativas de Moody's de un FCF ligeramente positivo en 2023 y un FCF de entre 200 y 300 millones de euros en 2024", subraya la agencia.
La revisión de Moody's se centrará en la finalización del proceso de auditoría de Grifols y la revisión de sus cuentas financieras auditadas de 2023; en los planes de la compañía para abordar los vencimientos de sus bonos en 2025 y la renovación del RCF y, de manera más general, su perfil de liquidez para los próximos 12 a 18 meses; y en una evaluación de las ganancias de la compañía y las perspectivas de generación de FCF en 2024 y más allá, a la luz de las necesidades de refinanciación de la compañía hasta 2025.
La calificadora pone el foco, además, en la liquidez de Grifols que se ha debilitado ante la proximidad de grandes vencimientos de deuda. "A 31 de diciembre de 2023, las fuentes de liquidez de Grifols comprendían un saldo de caja de 526 millones de euros y un RCF senior garantizado respaldado por 1.000 millones de dólares con vencimiento en noviembre de 2025", comenta.
"El RCF está sujeto a un acuerdo de apalancamiento elástico (deuda neta/EBITDA de un máximo de 7x) que se activa si los giros superan el 40%. El covenant de apalancamiento de Grifols era de 6,3x a finales de 2023. Según las previsiones de la compañía, Moody's no espera una generación positiva de FCF en 2024", afirma.
"También se enfrenta a grandes vencimientos de deuda en el primer semestre de 2025, con dos bonos por un total de unos 1.850 millones de euros que vencen en febrero y mayo de 2025. Grifols espera recibir 1.800 millones de dólares (unos 1.600 millones de euros) de la venta de su participación en SRAAS, que pretende aplicar a la reducción de la deuda", concluye Moody's.