La Fiscalía alemana ordena registrar la sede central de Volkswagen
La compañía reconoció la manipulación de motores diésel
- La Policía entra en las dependencias de la firma de Volkswagen
- Los agentes han centrado el operativo en la búsqueda de documentos y material informático
Actualizado : 16:47
La policía alemana ha llevado a cabo un registro en la sede central de Volkswagen después de que la Fiscalía de Braunschweig ordenara la entrada de las autoridades en el cuartel de la compañía de Wolfsburgo.
Los agentes han centrado el operativo en la búsqueda de documentos y material informático
Los agentes han centrado el operativo en la búsqueda de documentos y material informático relacionado con el escándalo por la manipulación de motores diésel, según ha informado 20 Minutos.
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OFICINA DE LUCHA CONTRA EL CRIMEN
Los registros han sido realizados por tres funcionarios de la Fiscalía y han contado con la colaboración de la Oficina de Lucha contra el Crimen de Alemania, según ha informado El Mundo. La intención de las autoridades era poder hacerse con el control de material comprometido antes de que fuera destruido y conseguir que estos documentos esclarezcan algunas de las incógnitas que se ciernen sobre el escándalo.
También se han producido registros en otras instalaciones de la compañía para tratar de encontrar material que que desvele quiénes son los responsables en la manipulación de los vehículos. La Fiscalía ordenó la semana pasada iniciar una investigación para depurar responsabilidades. Mientras, la compañía informó antes de los registros de que contenía una amplia cantidad de documentación en su sede central de Wolfsburgo, ha informado AP.
DIMISIÓN DE WINTERKORN
El que fuera CEO de la compañía hasta el escándalo, Martin Winterkorn, reconoció que Volkswagen había manipulado cerca de 11 millones de vehículos diésel para que dieran un nivel de emisiones inferior al real. Este hecho provocó la dimisión de Winterkorn como presidente de la compañía y su sustitución por Matthias Müller, hasta entonces CEO y presidente de Porsche.
El propio Müller compareció a mediados de semana ante 20.000 empleados para asegurar, en uno de sus primeros discursos como presidente de la firma, que “esto va a ser doloroso”, en referencia a las consecuencias que va a tener el escándalo en la firma alemana.
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