El giro verde de Iberdrola pasa por el gas: dispara un 137% sus ciclos combinados
El bajo precio del gas hace despegar el uso de estas plantas, mientras el carbón se hunde
Actualizado : 09:23
La transformación renovable de las eléctricas es irremediable, no sólo porque todas las grandes compañías hayan prometido inversiones millonarias; también porque la legislación que ultima el Ejecutivo de Pedro Sánchez, las aboca a ello. Pero esa transformación no conlleva que el resto de centrales contaminantes desaparezcan. Algunas sí, como las de carbón. Y, aunque no emitan, también las nucleares, cuyo cierre está previsto para 2035. Sin embargo, otras, como los ciclos combinados, que emplean gas, van arañando terreno y se perfilan como las centrales de respaldo aunque no sean 100% verdes.
Esa evolución ya se percibe en el caso de Iberdrola. La compañía presida por Ignacio Sánchez Galán ha disparado su producción en España a través de sus seis centrales de ciclo combinado. En el conjunto de 2019, su producción en este mercado se ha elevado un 137%, hasta los 9.697 GWh, según la información que ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que desglosa su mix energético y que es anticipo a sus resultados anuales, que publicará el próximo 26 de febrero.
La explicación a este despegue de los ciclos combinados durante el pasado ejercicio es la evolución de los precios del gas, su precio competitivo, que ha hecho que se tire más de estas centrales a lo largo del año, según explican fuentes del sector. Y esa tendencia, previsiblemente, va a continuar a lo largo del ejercicio 2020.
APAGÓN DEL CARBÓN
Estas centrales de gas toman el relevo de las de carbón, que tiene sus días contados, con plantas encaminadas al cierre. En el caso de Iberdrola, en el conjunto del ejercicio, su producción con esta energía se desplomó más de un 78% y sólo alcanzó los 349 GWh.
Noticia relacionada
Reynés (Natugy) sobre fusiones energéticas: "Nos vemos bailando, somos un actor activo"En el caso de las renovables de Iberdrola, su producción neta en el conjunto del año se redujo un 14,6% (22.191 GWh) . Detrás está el retroceso de la hidroeléctrica en comparación con el año 2018, que fue especialmente lluvioso. Esta se recortó un 33% (a 9.082 GWh). Contrasta con la eólica, que creció un 7,2% (12.491 GWh). En ese mix energético de la compañía con sede en Bilbao, el principal eje sigue siendo el nuclear que, aunque estable respecto a 2018 (sólo repuntó un 0,9%), supuso 23.737 GWh; es decir, es más del 40% del conjunto de su producción neta de electricidad en España.
Las centrales de ciclo combinado se dibujan así como ‘back up’ para las renovables durante el proceso de transición de los próximos años, hasta el objetivo final de una economía 100% descarbonizada en el año 2050, que ha marcado la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera.
A la espera de conocer qué previsiones tiene Iberdrola para sus ciclos combinados, hace unos días, el presidente de su competidora Naturgy, Francisco Reynés, aseguró que estas plantas son “una solución” de respaldo. Sin embargo, descartó la construcción de nuevas centrales porque, aseguró, los existentes están “infrautilizadas”.