E.On recortará 5.000 empleos tras la integración de Innogy pactada con RWE
Espera lograr sinergias de entre 600 y 800 millones de euros para 2022
- E.On ha informado de que en 2017 obtuvo un beneficio neto atribuido de 3.925 millones de euros
Actualizado : 12:01
E.On tiene previsto suprimir 5.000 puestos de trabajo en el marco de la integración de Innogy, filial de renovables de RWE, con la que ha pactado un intercambio de activos valorado en unos 22.000 millones de euros y que dará un vuelco al sector energético alemán.
La 'utility' germana tiene previsto superar los 70.000 empleados cuando integre Innogy, frente a los actuales 42.699, por lo que el consejero delegado de E.On, Johannes Teyssen, subrayó que el ajuste de plantilla previsto será inferior al 7%, informa Europa Press.
"Según cálculos iniciales, podemos decir que un máximo de 5.000 empleos de la nueva compañía se verán afectados por la integración. Con más de 70.000 empleados, esto es menos del 7%", indicó el máximo ejecutivo de la alemana.
En este sentido, E.On estimó en una horquilla de entre 600 y 800 millones de euros para 2022 las sinergias que espera alcanzar gracias a la integración de Innogy.
Por otro lado, E.On informó de que en 2017 obtuvo un beneficio neto atribuido de 3.925 millones de euros, frente a las pérdidas de 8.450 millones de euros del año anterior, mientras que sus ventas sumaron un total de 37.965 millones de euros, un 0,5% menos.
"2017 fue un año de éxito. Nuestras ganancias se situaron en la parte alta del rango previsto y recortamos significativamente nuestra deuda", declaró Teyssen, señalando que el acuerdo de intercambio de activos pactado con RWE representa "una de las transacciones más creativas de la historia industrial de Alemania", que pondrá a E.On en una mejor posición para aprovechar el potencial de crecimiento del nuevo mundo energético.
E.On y RWE llegaron a un acuerdo durante el pasado fin de semana para llevar a cabo un intercambio de activos valorado en 22.000 millones de euros que supondrá una profunda reestructuración del sector energético germano, incluyendo el traspaso de la propiedad del 76,8% de Innogy, filial de renovables de RWE, a su competidora, que lanzará una OPA sobre el resto de la compañía en poder de accionistas minoritarios.