Economía.- Sánchez prevé ahorrar 67.000 millones en importación de combustibles gracias al Perte de energías renovables
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha señalado este miércoles que España puede ahorrar alrededor de 67.000 millones de euros en importación de combustibles gracias al Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) de energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento (Erha).
En la presentación del proyecto impulsado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el líder del Ejecutivo ha destacado que el conjunto de medidas que incorpora el plan servirá para impulsar una transición energética "verde", "justa" y "duradera" que reducirá la dependencia energética exterior de España, algo que ha calificado como una de las "asignaturas pendientes" de la economía nacional.
En su opinión, también redundará en el impulso de la reindustrialización, con la creación de "empleos de calidad" y nuevos modelos de negocio, lo cual se traducirá asimismo en una forma de combatir la despoblación con la habilitación de "sinergias territoriales" gracias a factores como el despliegue del biogás en torno a la actividad agraria.
CONVOCATORIAS DE PROYECTOS POR 500 MILLONES
Sánchez también ha reiterado que el Perte de energías renovables, que se prevé que movilizará unos 16.370 millones de euros en inversiones en los próximos años, moverá ya sus primeros 500 millones de euros en proyectos con una primera convocatoria dotada con 250 millones, otra de 150 y dos más con un monto total de 100 millones de euros.
La convocatoria de 250 millones de euros estará ligada al impulso de la I+D en la cadena de valor asociada al hidrógeno renovable, a nuevas líneas de ensayo para la fabricación de componentes para el hidrógeno y para prototipos de nuevos vehículos impulsados por hidrógeno.
En cuanto a la convocatoria de 150 millones de euros, el presidente del Gobierno ha destacado que se centrará en proyectos pioneros en hidrógeno renovable que aúnen generación, fabricación y el uso de proximidad en sectores de difícil electrificación, como el transporte pesado.
Los 100 millones restantes irán a dos convocatorias de ayudas; la primera se centrará en el almacenamiento energético y estará abierta a organismos de investigación, universidades, centros tecnológicos y empresas, mientras que la segunda servirá para proyectos pilotos de comunidades energéticas vinculadas a la innovación social y la participación ciudadana.