Economía.- Sánchez pide a Rajoy y Rivera que apoyen la iniciativa del PSOE para mejorar las condiciones de 'Las Kellys'

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Europa Press | 05 abr, 2018

MADRID, 5 (EUROPA PRESS)

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha saludado como una "muy buena iniciativa" el encuentro del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con el colectivo de las limpiadoras de hoteles, pero le ha pedido que esta reunión no quede en una mera foto, sino que se traduzca en modificaciones legislativas que pongan fin a las condiciones de miseria y explotación de estas trabajadoras subcontratadas.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha reunido hoy durante casi horas en La Moncloa comprometido con cinco representantes de la asociación 'Las Kellys' (las que limpian), con quienes se ha comprometido a impulsar acciones para mejorar las condiciones laborales de las camareras de piso.

En un vídeo difundido por el PSOE, Sánchez emplaza a Rajoy, pero también al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, a que apoyen la proposición de ley socialista que busca modificar el artículo 42.1 del Estatuto de los Trabajadores para garantizar la igualdad en las condiciones laborales de los trabajadores subcontratados, cambio que afectaría directamente al colectivo.

Se trata, explica Sánchez, de que los trabajadores subcontratados "gocen de las mismas condiciones laborales que la empresa matriz", es decir, que tengan los mismos sueldos, condiciones de contratación, tiempo de trabajo y descanso, igualdad, protección de la maternidad, lactancia y paternidad y frente a riesgos laborales.

El PSOE también defiende la necesidad de modificar otro apartado del Estatuto de los Trabajadores para que prevalezca el convenio sectorial frente al de la empresa.

La proposición de ley de los socialistas entrará en la fase de ponencia el próximo 17 de abril, después de que el Congreso desbloqueara la tramitación de esta iniciativa que el Gobierno llegó a vetar y que incluso está recurrida en el Tribunal Constitucional porque la Mesa de la Cámara ignoró el escrito de disconformidad y el Ejecutivo planteó un conflicto de competencias. Esta reforma, impulsada por el PSOE, busca derogar una pequeña parte de la reforma laboral de 2012.

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