Economía.- Inmovilizados 9.000 kilos de aceitunas no aptas para el consumo humano en Salvatierra de Santiago (Cáceres)
CÁCERES, 23 (EUROPA PRESS)
Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Equipo ROCA de la Compañía de Cáceres, han inmovilizado 9.000 kilos de aceitunas no aptas para el consumo humano en Salvatierra de Santiago (Cáceres).
Así, en una inspección efectuada en un punto de compraventa de aceitunas en dicha localidad cacereña, los agentes han inmovilizado este fruto que permanecía almacenado en el interior de una parcela bajo unas condiciones higiénico-sanitarias "inadecuadas", tal y como quedó reflejado en el informe emitido por los Servicios Farmacéuticos del Servicio Extremeño de Salud, cuyo personal certificó que no eran aptas para el consumo humano.
En la inspección, que tuvo lugar el pasado día 17 de diciembre, pudieron corroborar que las aceitunas se almacenaban en condiciones "deficientes", unas sobre el suelo de hormigón y otras directamente sobre el terreno.
A este hecho se le sumaba el vertido que originaba el fruto, el cual desprendía un líquido que salía a la vía pública y discurría hasta un pequeño regato, con la posible contaminación al medio ambiente que pudiera originar dicho vertido.
Ante las "condiciones higiénico-sanitarias insuficientes" observadas en el almacenaje del fruto, los agentes han incoado diferentes expedientes administrativos hacia el responsable del punto de compraventa por la supuesta comisión de varias infracciones administrativas en materia de sanidad alimentaria y medio ambiente.
A su vez, han inmovilizado los 9.000 kilos de aceitunas que deberán ser destruidas o destinadas a otro fin diferente al alimenticio, ya que se han catalogado como no aptas para el consumo humano, ha informado en nota de prensa la Guardia Civil.
Cabe reseñar que esta persona, responsable del punto de compraventa de aceitunas, ya procedió de forma similar a primeros del año en curso cuando los agentes de este mismo equipo, al inspeccionar esta misma instalación, corroboraron una serie de anomalías, llegando a inmovilizarle 15.000 kilos de aceitunas no aptas para el consumo humano.
Esa actuación desembocó entonces en la investigación penal del hombre, en enero de 2024, como presunto autor de los delitos de desobediencia, falsedad documental y contra la salud pública, en grado de tentativa, al comprobar los agentes que aquel fruto había sido retirado, sin autorización y bajo el precinto de inmovilización, pretendiendo trasladar las aceitunas a una almazara para su posterior transformación.