Economía.- El CEO de Boeing admite fallos en el software y una alta carga de trabajo de los pilotos
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El presidente ejecutivo de Boeing, Dennis Muilenburg, ha admitido este jueves fallos en el software del sistema de control automatizado (MACS) de vuelo del 737 MAX, unido a una alta carga de trabajo de los pilotos, como factores determinantes en los accidentes de Etiopía e Indonesia relacionados con este modelo.
En un comunicado, el presidente ejecutivo del fabricante aeronáutico señala que tras el informe preliminar de la investigación del accidente del vuelo 302 de Ethiopian Airlines, es "evidente" que existe una relación con el siniestro de Lion Air, ambos relacionados con una señal errónea del sensor del ángulo de ataque del avión que activó el sistema MACS durante el vuelo.
"La historia de nuestra industria muestra que la mayoría de los accidentes son causados por una cadena de eventos", admite Muilenburg, que apunta a "un entorno de alta carga de trabajo" por parte de los pilotos.
En este sentido, ha enfatizado que es responsabilidad de Boeing "eliminar este riesgo" y ha recordado que desde el accidente de Lion Air en Indonesia los principales ingenieros de la compañía y expertos técnicos han trabajado "incansablemente" en colaboración con la Administración Federal de Aviación de los EEUU (FAA por sus siglas en inglés) para finalizar e implementar una actualización del software que asegurará que este tipo de accidentes "nunca vuelvan a suceder".
En este sentido, ha indicado que el fabricante americano se está tomando tiempo para actualizar "correctamente" el sistema MACS, que está a punto de finalizar, y se ha mostrado convencido de su certificación e implementación en la flota 737 MAX de todo el mundo en las próximas semanas.
UNO DE LOS AVIONES MÁS SEGUROS DEL MUNDO
En esta línea, ha trasladado la confianza en la seguridad fundamental del 737 MAX y ha recalcado que cuando este modelo vuelva a volar con las medidas puestas en marcha por Boeing, que además de la actualización del software que impide su activación involuntaria ha diseñado medidas para mejorar la formación de los pilotos, será uno de los aparatos "más seguros" que hayan surcado los cielos.
"En Boeing asumimos la responsabilidad de construir y entregar aviones a nuestros clientes de líneas aéreas y al público en vuelo que son seguros para volar y cada uno de los pilotos profesionales y dedicados de todo el mundo puede volar de forma segura. Esto es lo que hacemos en Boeing", ha enfatizado.
En este sentido, ha reiterado que la compañía se ha centrado "incansablemente" en la seguridad y lo seguirá haciendo porque es parte de su esencia, aunque son conscientes de que puede seguir mejorando. "Nuestro equipo está decidido a seguir mejorando la seguridad en asociación con la industria aeroespacial global y la comunidad en general. Es este sentido compartido de responsabilidad por la seguridad de vuelo que se extiende y nos une a todos", ha alegado.
Muilenburg, que asegura no poder recordar un momento "más desgarrador" en toda su carrera, ha pedido perdón en nombre de la compañía y ha lamentado el impacto que esta crisis ha tenido en los clientes del fabricante americano y en los pasajeros. Asimismo, ha lamentado las pérdidas humanas y ha trasladado sus condolencias a las familias de los fallecidos.
"Sabemos que las vidas dependen del trabajo que hacemos y que exige la máxima integridad y excelencia en la forma en que lo hacemos. Con un profundo sentido del deber, asumimos la responsabilidad de diseñar, construir y apoyar los aviones más seguros en los cielos. Sabemos que cada persona que sube a bordo de uno de nuestros aviones confía en nosotros. Juntos, haremos todo lo posible para ganar y recuperar esa confianza de nuestros clientes y del público volador en las próximas semanas y meses", ha concluido.