El dilema de Saracho para resucitar al Popular: ampliación exprés o el vía crucis de vender activos
Los analistas creen que ampliar capital puede resultar perjudicial para el banco
- La entidad ha llevado a cabo dos ampliaciones en 2012 y 2016 por más de 5.000 millones
- Saracho será nombrado oficialmente en la Junta de Accionistas del próximo lunes
Actualizado : 10:37
Banco Popular aún tiene tareas pendientes. En opinión de la mayoría de los expertos, sólo tiene una salida: otra ampliación de capital. Sin embargo, una mayoría de las fuentes financieras consultadas por Bolsamanía aseguran que ese no será el primer paso que Emilio Saracho querrá dar una vez sea nombrado presidente del banco el próximo 20 de febrero.
En los últimos días son muchas las especulaciones que se están gestando en torno al banco español. Tras anunciar el pasado 3 de febrero unas pérdidas anuales de 3.485 millones de euros en 2016 y dejarse en bolsa desde esa fecha un 9%, fuentes financieras aseguran que el primer paso de Emilio Saracho, cuando ya haya relevado oficialmente a Ángel Ron, será vender TotalBank, la filial estadounidense de Popular, y la división de banca privada del banco, así como impulsar la venta de ‘ladrillo’ con la creación de socimis u otras empresas con otros socios.
Sin embargo, los analistas, en general, creen que lo primero que el futuro presidente debería hacer sería una ampliación de capital. “Claramente debería ampliar capital si pretende seguir en solitario durante la reestructuración”, afirma Ignacio Cantos, analista de ATL Capital.
La ratio de capital 'CET1 fully loaded' ha quedado reducida al 8,2%, frente al 10,9% de finales de 2015
“Pensamos que los inversores de la entidad esperan una ampliación”, asegura Xavier Cebrián, gestor de fondos de inversión de GVC Gaesco Gestión, quien añade que desde la gestora “aconsejan hacer la ampliación de capital lo antes posible para que vuelva de nuevo la confianza del inversor”, mientras que el analista de Link Securities, Juan José Fernández-Figares, opina que Popular se va a ver “obligado” a llevar a cabo una ampliación “para fortalecer su estructura de capital”.
En la misma línea, el analista de Admiral Markets, Juan Cardiñanos, explica que tras conocer los resultados de la entidad consideran “fundamental” la ampliación. “Antes lo pensábamos y ahora, tras ver los resultados presentados por la entidad, más todavía”, indica el analista, quien añade que “las cuentas del banco aún no están saneadas”. Además de estos recelos, hay un dato que casi hace inevitable la ampliación: la ratio de capital más seguida por el mercado -CET1 fully loaded- ha quedado reducida al 8,2%, frente al 10,9% de finales de 2015.
DISCREPANCIAS EN EL MERCADO
El problema es que ya llueve sobre mojado en este terreno para la entidad. Banco Popular ha realizado dos ampliaciones por más de 5.000 millones de euros en los últimos cinco años. En concreto, una la llevó a cabo en noviembre de 2012 por un importe superior a 2.500 millones y la segunda fue el pasado mes de mayo por un importe en torno a 2.505 millones. Ambas operaciones tenían como objetivo “reforzar su balance y asegurar la rentabilidad futura de la entidad”, según justificó el grupo bancario. Además, los dividendos fueron suprimidos.
Es decir, sería la tercera ampliación en menos de cinco años, una secuencia demasiado exigente para los accionistas. Por eso Saracho intentará explorar otras vías. La puede “evitar” porque Popular “generará capital orgánicamente a partir de 2017”, asegura Nuria García, analista de Ahorro Corporación. “Es necesario que el mercado conceda tiempo a Saracho y su proyecto para poner sus niveles de capital más en línea con comparables”, indica la experta.
OTRAS RECOMENDACIONES
“Una nueva ampliación de capital posiblemente podría ser perjudicial de cara a la falta de confianza que lleva experimentando el banco en los últimos meses”, indica Daniel García, analista de XTB. Además de una ampliación de capital, los expertos coinciden en que Popular debe llevar a cabo más reformas. En opinión de la analista de Ahorro Corporación, “el mercado pide a Saracho revisar los objetivos estratégicos, a día de hoy demasiado ambiciosos, hacia unos más alcanzables”.
Además de una ampliación de capital, los expertos coinciden en que Popular debe llevar a cabo más reformas
Para Fernández-Figares, otro objetivo importante es “sanear” el balance sacando del mismo una parte importante de los activos “malos”. El analista de XTB opina que lo más importante consistiría en buscar otras alternativas de financiación que no vengan directamente de “diluir” a los accionistas.
“La solución podría estar en un cambio de gestión y adoptar medidas diferentes a lo que hemos estado viviendo últimamente”, asegura el experto. Y añade: “El problema que lleva acarreando y arrastrando Popular no viene de un día y, salvo un cambio radical de su gestión que sea bien visto por los inversores, parece difícil que sus problemas en el parqué se vayan a solucionar de la noche a la mañana”.
El mercado pide a Saracho “que consiga separar totalmente su parte financiera y su parte inmobiliaria para así poder generar negocio en dos líneas independientes entre ellas que pueden generar buenas líneas de ingresos”.
TENSIÓN ENTRE LA CÚPULA
Otro objetivo de Saracho será devolver la calma al banco, ya que los ánimos dentro de la entidad han estado a flor de piel en los últimos meses. La última prueba se observó en la presentación de los resultados anuales de 2016. El pasado 3 de febrero, mientras el actual presidente, Ángel Ron, presentaba las cuentas del banco, también se vio en la necesidad de corregir al consejero delegado de la entidad, Pedro Larena, sobre las provisiones.
En concreto, Larena dijo que el volumen de provisiones del cuarto trimestre de 2016, en torno a los 5.700 millones de euros, anticipatorias de los tres próximos ejercicios, ponía “obstáculos” a la capacidad del banco. Pero Ron le corrigió e indicó que “eso no es así, al revés”, sanea el balance y facilita las cosas y el crecimiento del banco para el nuevo equipo directivo. Es evidente la tensión entre el presidente y el consejero desde que este se incorporó el pasado verano. Larena, que procede de la banca de inversión como Saracho, se perfila como la mano derecha de éste.