De vender cacahuetes en el estadio de los Yankees a ser el CEO de una gran agencia de publicidad

El presidente de McCann Worldgroup, Harris Diamond, dirige una de las mayores agencias de publicidad de México, con unos ingresos de 7.537 millones de dólares en 2014.

En una entrevista con CNN Expansión, el CEO y publicista repasa su trayectoria, que se inició de joven vendiendo cacahuetes en el estadio de los Yankees, en Nueva York. Asegura que fue una gran lección para comprender la relación entre el dinero y el trabajo.

Su sueño era ser bateador, sin embargo, acabó en la industria de la publicidad. Entre medias, trabajó como administrativo, en consultoría política, y de ahí a las relaciones públicas. En 1996 aterrizó en Weber Shandwick, parte del holding de empresas de comunicación, publicidad y relaciones públicas que es Interpublic Group, y al que también pertenece McCann Worldgroup.

Mad Men dice algunas verdades sobre cómo es la gente que trabaja en la agencias de publicidad. La mercadotecnia siempre ha atraído a personas con carácter fuerte, ambiciosas y orientadas al éxito

Desde 2012 preside y dirige McCann Worldgroup, y ha sido premiado como el ejecutivo del año en el sector de la publicidad. Explica que mantiene un balance entre clientes globales y locales. “Tenemos muchos clientes globales. Tenemos a Coca-Cola, L'Oreal, Nestlé, pero también muchos clientes locales. Con los primeros, tratamos que sus mensajes conecten con la cultura de cualquier país en el que se encuentren. Aunque al final, influye mucho de dónde vienen. Me refiero a que Cathay Pacific está influenciado por la cultura de Hong Kong y Microsoft, por Seatle”, argumenta en CNN Expansión.

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EL MAD MEN QUE QUERÍA SER BATEADOR

Así titula la entrevista CNN Expansión, haciendo referencia a la famosa serie de HBO. “Mad Men dice algunas verdades sobre cómo es la gente que trabaja en la agencias de publicidad. La mercadotecnia siempre ha atraído a personas con carácter fuerte, ambiciosas y orientadas al éxito”.

“La sociedad ha cambiado, ha progresado positivamente. Es interesante y divertido ver cómo ha cambiado el mundo. Pero debemos recordar que es arte (la publicidad), es fantasía”, opina Harris Diamond.

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