De enemigo a aliado: el 'streaming' sale al rescate de la industria musical
Después de reducir en un 40% sus ingresos en quince años...
- ...en 2016 vivió el mayor crecimiento de su facturación a escala mundial en los últimos diez años, un 6%...
- ... y coincide con el segundo año en el que los beneficios derivados de las nuevas plataformas digitales superan a los de los soportes tradicionales...
Actualizado : 20:14
Lo que no te mata te hace más fuerte. Eso deben pensar aquellos que pronosticaron la muerte de la industria musical con la llegada del mercado digital. No sólo ellos se equivocaron sino que los más positivos se quedaron cortos. Después de quince años (1999-2014) de ‘caída en picado’, donde perdió el 40% de sus ingresos, el sector comienza a ver una gran luz al final del túnel.
En 2016, la industria vivió el mayor crecimiento de su facturación a escala mundial en los últimos diez años, un 6%, hasta los 15.700 millones de dólares, según los datos de la Federación Internacional de la Industria Discográfica (IFPI, en sus siglas en inglés). Un hecho que coincide con el segundo año en el que los beneficios derivados de las nuevas plataformas digitales superan a los de los soportes tradicionales. Los ingresos globales de música digital supusieron el 50% de los ingresos totales, frente al 34% de ventas físicas. El otro 16% corresponden a descargas, derechos de autor y la cesión de los derechos de sincronización para una obra audiovisual.
Ibai Cereijo, director de la agencia musical Woo Media y experto en la industria musical, define esta época como “el periodo de mayor esplendor de la historia de la música”.”Se consume más música que nunca, tanto grabada, como en eventos en directo y sincronización. Nunca había tenido tanta presencia en nuestras vidas, ni tanta influencia”, apunta.
Un crecimiento que está liderado por los servicios de consumo de música a través de la red, el streaming. Solo en 2016, las facturación de los servicios de 'streaming' de pago y 'freemium' (servicio gratuito básico con publicidad) alcanzaban los 6.500 millones de dólares, un 73% más que en 2015 y un 1.200% más que 2010, según los datos del informe realizado por Goldman Sachs sobre la industria.
“Hace sólo cinco años, la duda todavía era saber cuál era el futuro: el 'streaming' o las descargas de música. Hoy, quedan pocas dudas al respecto: el futuro es el 'streaming', incluso el presente y podemos afirmar con casi total seguridad que, dentro de 15 años, la práctica totalidad del consumo musical para el gran público se hará así”, indica Cereijo.
Esta evolución desata el optimismo con la industria de la música. Goldman Sachs estima que tras superar la barrera de los 100 millones de suscriptores de pago de las plataformas, sus estimaciones sobre la industria para 2027 se sitúan en 1.000 millones de streaming de pago y en 1.500 y 2.000 millones de suscriptores freemium. Esta evolución llevará a la industria a tener un valor de mercado de entre 100.000 y 160.000 millones de dólares. En la actualidad, la entidad financiera valora en más de 50.000 millones de dólares este sector.
ESTE NEGOCIO ES COSA DE DOS
Y buena parte de ese mercado está compañía sueca y el gigante de la manzana: Spotify y Apple Music. Entre las dos compañías manejan una cuota de negocio agregada cercana al 60% en el ámbito del 'streaming'. “Hay proyectos de competencia muy sólidos y dinámicos, como Deezer, sobre todo, y también Google Music, Tidal y Napster”, indica el director de la agencia musical Woo Media. Sin embargo, estos competidores tiene muy difícil arrebatar cuota de mercado a estos dos gigantes, “sobre todo en un sector donde los costes de operación son tan elevados”, recuerda el experto.
La compañía sueca controla una cuota de mercado del 40% y el servicio de música en atreaming de Apple, un 20%. “No sería descabellado que se produjera una selección natural y, efectivamente, sólo quedarán esos dos buques insignia”, valora Ibai Cereijo.
UN LÍDER SIN BENEFICIO
Ahora bien, esta compañías aún deben pasar la reválida de la rentabilidad. Pese a controlar el mercado, Spotify no es rentable. La compañía sueca ha registrado pérdidas desde que fue creada hace una década por Daniel Ek y Martin Lorentzon. La empresa perdió 601 millones de dólares el año pasado, su mayor pérdida hasta el momento. No obstante, Spotify consiguió disparar sus ingresos un 52%, hasta los 2.930 millones de euros y duplicar su número de usuarios con más de 140 millones de usuarios activos. Un escenario que muestra la gran dificultad que tiene lograr beneficio incluso para el propietario del servicio de 'streaming' más grande del mundo.
Entre su dominio del mercado y sus problemas de rentabilidad, la compañía podría estar preparando una inminente Oferta Pública de Venta (OPV). Según informa Financial Times, el servicio de música en 'streaming' ha contratado a un grupo de banqueros y consejeros para que supervise sus operaciones. Un movimiento que alimenta las especulaciones de su salida a bolsa y donde su valoración se estima en 8.500 millones de dólares.
¿Y LOS ARTISTAS Y DISCOGRÁFICAS?
El 75% de los ingresos que obtienen los servicios de 'streaming' va a parar a las discográficas por derechos de reproducción sobre las canciones, según apunta Financial Times. Por otro lado, según los cálculos de Spotify, por cada reproducción de una canción, el dinero que reciben los dueños de los derechos está entre los 0,006 dólares y 0,0084 dólares. “Ni los artistas están contentos, ni los sellos discográficos ingresan lo que desearían, ni las grandes plataformas (Spotify, Apple Music, Deezer...) han conseguido todavía obtener ganancias”, indica Ibai Cereijo.
Actualmente, según indica la compañía sueca, el 30% de las ganancias por suscripciones se queda en la empresa y el 70% se va a quienes tienen los derechos sobre las canciones reproducidas. “Aunque parece claro que el modelo de negocio es el 'streaming', aún no está maduro y hace falta que la base de consumidores de pago crezca. Año tras año aumenta, pero todavía no lo suficiente como para acercarnos siquiera a los números astronómicos época de bonanza pre-Internet”, valora el experto en la industria musical.