Buenaventura niega que Grifols haya elevado su deuda por la investigación de la CNMV
Asegura que se trata de una "lectura errónea"
El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Rodrigo Buenaventura, ha aclarado este miércoles que Grifols no ha notificado un aumento la cifra de endeudamiento de 2023, según se trasladó en varios medios de comunicación el pasado 4 de abril, sino que se trata de una "lectura errónea".
"En nuestra comunicación [del 23 de marzo] dejamos claro que, por las averiguaciones que hicimos, no se desprendía ninguna variación de la cifra de endeudamiento de las cuentas de 2023 y la que publicó Grifols recientemente [el 4 de abril]", ha explicado Buenaventura en su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados para dar cuenta del informe de la CNMV de 2022, del que no pudo informar en 2023 por el adelanto de las elecciones generales.
Sin embargo, la CNMV pidió a Grifols que calculase la ratio de endeudamiento siguiendo dos metodologías, en una de ellas se incluían los arrendamientos a largo plazo, y en la otra no. "Pero la cifra de endeudamiento de la compañía no ha sufrido ninguna variación, no ha habido ningún incremento de deuda como resultado de las averiguaciones que ha hecho la CNMV", ha apostillado.
En concreto, la semana pasada Grifols remitió a la CNMV la información requerida por el organismo supervisor en la que ha desvelado que procederá a reducir a dos el número de medidas empleadas para reflejar el Ebitda en sus comunicaciones de resultados y situaba la deuda neta en 2023 en 10.527 millones de euros, con 1.111 millones en contratos de 'leasing'.
En cuanto a posibles medidas que se puedan tomar para no beneficar a bajistas que emitan recomendaciones, Buenaventura ha rechazado que se trate de una "maldición española", sino que es una cuestión que ocurre en todos los mercados del mundo.
Ha explicado que forma parte habitual del negocio inversor y que la norma incluye dos condiciones a esta práctica: una, que quien emita el informe diga "claramente" que tiene una posición en la compañía de la que hable, ya sea alcitas o bajista, y que haya transparencia sobre que hay un interés subyacente; y dos, que en el informe no se incorpore información engañosa o falsa "a sabiendas".
"Si se respetan esas normas, yo creo que el mercado puede funcionar de forma ordenada", ha subrayado antes de recordar que la CNMV se ha comprometido a analizar la conducta de Gotham por si hubiese habido información engañosa. "No estamos ahí porque estamos elaborando el análisis empezando por las cuentas de Grifols. Tendremos que concluir nuestras actuaciones y, en función de como concluyan, tomaremos los acuerdos oportunos", ha añadido.
Buenaventura ha defendido, además, la actuación del supervisor en el caso de Grifols, al señalar la "celeridad" con que se ha actuado ante un informe [el de Gotham] que llegó a desencadenar caídas de entre el 40% y el 50% según las sesiones bursátiles.
"Ante esa información, reaccionamos haciendo una averiguación de urgencia, enfocada sobre las cuestiones que se estaban poniendo en duda, y recabamos información y emitimos las conclusiones con la máxima celeridad dentro de la complejidad que tenía el asunto", ha destacado.
OPA SOBRE TALGO
El presidente de la CNMV también ha sido preguntado por los diputados presentes en la comisión por la OPA de Magyar Vagon sobre Talgo, una operación que debe autorizar la Junta de Inversiones Exteriores.
Ha explicado la "secuencia" en torno a la autorización, que es distinta para el caso de Indra, donde esta junta no tuvo que pronunciarse puesto que los accionistas que hicieron la oferta eras españoles, y no extranjeros.
Ha dejado claro que, en el caso de Talgo, la OPA se ha anunciado y se ha presentado ante la CNMV, donde está pendiente de admisión a trámite por parte del supervisor. "Cuando la admitamos, que es cuando ya hemos verificado que tiene los elementos formales y esenciales y el aval para poder seguir tramitándose, nosotros iremos tramitando la autorización de esa OPA", ha señalado.
Sin embargo, no podrá dar su visto bueno hasta que Inversiones Exteriores no la autorice por su parte. Si finalmente esa autorización no llega, se finalizaría el recorrido de la OPA a Talgo dentro de la CNMV.
Buenaventura ha recordado, sin embargo, que la actuación de la CNMV es "independiente y distinta" a la del Gobierno, en la medida en que el supervisor de los mercados financieros se preocupa por la OPA que va hacia a los accionistas, mientras que el Ejecutivo analiza si la operación es compatible con los intereses generales de España.