BBVA pone en cuarentena su salida de Portugal arrastrado por la sangría de BES

La situación que atraviesa Banco Espírito Santo (BES) parece complicarse día a día. Esta mañana conocemos que Rioforte, un hólding de la rama no financiera de la familia Espírito Santo (principal accionista de BES), ha solicitado formalmente acogerse a una "gestión controlada”, figura jurídica similar al concurso de acreedores.

Según EFE, esta medida responde a las “dificultades” de la sociedad que ostenta el 100% de su capital, Espírito Santo International (ESI), según el comunicado difundido por Rioforte. Cabe destacar que esta solicitud no ha sorprendido ya que ESI, con sede en Luxemburgo, hizo lo mismo el pasado día 18, argumentando entonces que no estaba “en condiciones de cumplir con sus obligaciones, debido al vencimiento de una parte significativa de su deuda”.

En este escenario, el Banco de Portugal (BdP) se afana por darle solución a una situación insostenible con una cotización desplomada. La autoridad lusa se ha puesto en contacto con al menos cinco bancos internacionales que pudieran estar interesados en BES. Según Diário Económico, Banco Santander y Bradesco Brasil se encuetran entre las entidades que más interes han mostrado por BES.

Y si Banco Santander apuesta por Portugal, BBVA no iba a ser menos. Según declaraciones de fuentes financieras a El Confidencial, el grupo presidido por Francisco González seguirá en el país vecino al haber rechazado por insuficientes las ofertas recibidas en las últimas semanas por su filial portuguesa. El consejo de administración ha puesto en cuarentena la desinversión, que se ha visto afectada por el desplome del Banco Espírito Santo.

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