BBVA despidió a Béjar tras reconocer este que se reunió con Villarejo en 2016

Le acusó de participar "de forma activa" en contratar a Cenyt sabiendo que usaba medios "ilícitos"

Por

Bolsamania | 08 feb, 2020

BBVA

17:35 22/11/24

  • 9,17
  • -0,91%-0,08
  • Max: 9,34
  • Min: 8,94
  • Volume: -
  • MM 200 : 9,34

BBVA despidió a Antonio Béjar, directivo de sus filas al que previamente había destituido como presidente de Distrito Castellana Norte (DCN), la empresa ejecutora de la Operación Chamartín, el pasado 18 de septiembre. Lo hizo tras obtener las conclusiones preliminares de la auditoría forensic realizada por PwC en relación con la contratación de Grupo Cenyt, la empresa de José Manuel Villarejo, por parte del banco a lo largo de trece años y descubrir que Béjar se reunió con el excomisario de Policía en 2016, como él mismo reconoció, según desvela el sumario de la pieza novena del caso Tándem, al que ha tenido acceso Bolsamanía.

En el ingente sumario, que se extiende a lo largo de más de 5.000 folios, está aportada la carta de despido que BBVA entregó en mano a Antonio Béjar, en aquel momento directivo reincorporado a sus filas tras su destitución como presidente de DCN. En ella, el banco expone las razones por las que decidió prescindir de Béjar.

Fundamentalmente, la entidad procedió al despido tras detectar en la investigación interna "la existencia de determinadas irregularidades e incumplimientos importantes", de los que responsabiliza a Béjar.

"Usted participó de forma activa en la gestión de las relaciones del banco con la sociedad Cenyt y su división V&V Development, así como en la gestión del pago por la colaboración de esta empresa, aun cuando conocía que ofrecía la utilización de medios y prácticas irregulares y potencialmente ilícitos para la realización de sus investigaciones, incluyendo la oferta de información procedente de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en activo, sin que usted nunca denunciara dicha situación, como se detalla en este apartado", apunta BBVA en la carta de despido.

De hecho, Béjar, siempre según este documento recogido en el sumario, confirmó durante su declaración en el marco de la auditoría forensic que los informes que encargaba a Cenyt se los entregaba directamente al abogado Rafael Redondo, socio de Villarejo.

Para demostrar estas afirmaciones, la entidad detalla el envío de una serie de correos electrónicos y la entrega de varios informes, en los que se basa para acusar a Béjar de conocer la existencia de prácticas ilícitas, lo que "podía ocasionar riesgos de toda índole para el banco, incluido el riesgo reputacional, como ha sido finalmente el caso". "Y, aun conociendo lo anterior, usted nunca denunció o alertó de dicha situación", añade.

Sin embargo, el banco va más allá. A lo largo de la carta de despido va detallando todas las razones por las que considera que el exdirectivo no ha cumplido su función y añade que Béjar conocía "la vinculación del comisario Villarejo con Cenyt". E, incluso, recuerda que él mismo reconoció durante su declaración en el marco de la auditoría forensic que se reunió con el expolicía.

"En su declaración en la investigación forensic usted reconoció que se reunió personalmente con el señor Villarejo en el año 2016, y que llegó a conocer la vinculación de Cenyt con el comisario Villarejo, lo que podría suponer que Cenyt podría estar obteniendo la información para sus investigaciones de una forma ilícita", explica en la carta.

FIANZA Y DESTITUCIÓN EN DCN

Su despido de BBVA llegó casi dos meses después de su destitución como presidente de DCN, la cual se produjo justo después de que la Fiscalía Anticorrupción pidiera para él libertad bajo fianza de medio millón de euros tras una de sus declaraciones en sede judicial, realizada un viernes.

Tres días después, el lunes siguiente, esta solicitud de los fiscales fue retirada, pero Béjar ya estaba fuera de la presidencia de DCN y debía reincorporarse al puesto que dejó en BBVA para asumir ese cargo.

El banco prescindió definitivamente de él en septiembre del año pasado y lo hizo a través de un despido disciplinario, como se demuestra en la carta de despido aportada al sumario. Por ello, salió sin indemnización. Sin embargo, Béjar considera que el banco le debe una compensación. El derecho o no del exdirectivo a percibir una indemnización por su despido se dirimirá en los tribunales y se hará pronto, pues en unos días el banco y el exdirectivo se verán las caras en los juzgados.

Últimas noticias