La UE avala exigir a grandes empresas un 40% de mujeres en puestos directivos
Hace casi una década que la Comisión Europea ya intentó este cambio por primera vez
Los ministros de Asuntos Sociales de la UE han acordado este lunes defender una cuota de al menos un 40% de mujeres en los puestos directivos de las grandes empresas europeas, una medida que reclama Bruselas y que aún debe ser negociada con la Eurocámara, después de que las negociaciones para un cambio en este sentido fracasaran hace casi una década cuando la Comisión Europea intentó este cambio por primera vez.
"El acuerdo de hoy en el Consejo es un paso importante a favor de la igualdad", ha destacado la ministra francesa de Empleo e Inclusión Económica y presidenta de turno de la UE, Élisabeth Borne, en la reunión del Consejo, que ha apelado a acelerar las negociaciones con el Parlamento Europeo para adoptar este directiva.
Según ha añadido Borne, esta directiva contribuirá a romper "el techo de cristal" al que todavía se enfrentan las mujeres con "demasiada frecuencia" en el mundo laboral.
"España está por encima de la media europea en este momento. Hemos dado una orientación favorable a esta directiva, sin embargo, es sorprendente que siga habiendo países que no lo consideren un elemento relevante", ha apuntado la secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez, en declaraciones a los medios a su salida del Consejo.
"La decisión de hoy muestra lo que hemos avanzando en temas de igualdad", ha agregado la comisaria de Igualdad, Helena Dalli, sobre la norma respaldada por mayoría cualificada ante las reservas de algunas delegaciones.
La propuesta de directiva de la Comisión Europea apoyada en el Consejo da de plazo hasta 2027 para que las compañías alcancen un 40% de mujeres en puestos directivos no ejecutivos. Las compañías que no logren esta meta tendrán que aplicar criterios claros y neutros en la selección de puestos directivos que justifiquen no cumplir esta cuota.
En este sentido, Rodríguez ha lamentado que para ser aprobada la propuesta en el Consejo se hayan tenido que "rebajar" algunos de los elementos contenidos en la directiva, entre ellos retrasar el plazo hasta el 2027 para cumplir estos objetivos y que se excluyan de su aplicación las pequeñas y medianas empresas.
Los Estados miembros también tendrán que asegurarse de que las compañías priorizan a los candidatos cuyo género cuenta menor representación cuando los aspirantes a un puesto cuenten con similar cualificación y competencias profesionales.
La directiva contempla también que los países que hayan puesto en marcha medidas a nivel nacional para lograr un mayor equilibrio en las cúpulas empresariales, podrán suspender los requisitos establecidos por esta directiva en lo que respecta a la selección de candidatos, una excepción que se aplica también a los países que hayan cumplido ya estos objetivos.
Rodríguez ha lamentado que no se trate de medidas "más obligatorias" y ha argumentado que en España, cuando se trata de "medidas obligatorias" se han mejorado los porcentajes de mujeres en los consejos de administración. "En las empresas del Ibex, hemos pasado de un 19% del año 2015 a un 31% en el año 2020", ha destacado la secretaria de Estado de Igualdad.
Además, los gobiernos quieren que sean los Estados miembros y no las empresas quienes decidan cuál es el objetivo prioritario, si alcanzar un 40% de mujeres en puestos directivos no ejecutivos o bien el 33% de los miembros de la junta directiva.
Los Veintisiete han apoyado una propuesta que tiene su origen en la etapa de José Manuel Duro Barroso al frente de la Comisión Bruselas y que planteaba una cuota del 40% de presencia femenina en los puestos no ejecutivos de los consejos de administración de las empresas cotizadas. En 2012, la vicepresidenta Viviane Reding intentó sin éxito abordar esta medida.