UBS prevé que la Fed recortará tipos más de lo esperado por una recesión en EEUU
La caída de la inflación permitirá al banco central empezar a reducir sus tasas en marzo
Los estrategas de UBS lo tienen claro: la Reserva Federal (Fed) recortará los tipos de interés más de que lo espera el mercado a medida que la principal economía del mundo se dirige hacia una recesión. En base a esta premisa, desde el banco suizo prevén rebajas en las tasas de 275 puntos básicos el próximo año, casi cuatro veces por encima de lo que descuenta el consenso.
Además, estiman que una disminución continua de la inflación y el aumento del desempleo, que debilitirá la producción económica en 2024, permitirán al banco central comenzar a reducir los tipos en marzo.
UBS espera que el PIB de EEUU se contraiga medio punto porcentual a mediados del próximo año, con un crecimiento anual de la economía que caiga a solo el 0,3% en 2024 y una tasa de paro que se incremente a casi el 5% a finales del ejercicio.
"Con ese impulso desinflacionario adicional, esperamos que la flexibilización de la política monetaria el próximo año impulse la recuperación en 2025, lo que hará que el crecimiento del PIB vuelva a subir a aproximadamente 2-1/2%, limitando el pico de la tasa de desempleo al 5,2% a principios de 2025. Pronosticamos cierta desaceleración en 2026, en parte debido a la consolidación fiscal proyectada", explican Arend Kapteyn y Bhanu Baweja, analistas de la entidad.
Para respaldar sus pronósticos, en UBS tiran de historia y hacen referencia a los ciclos de flexibilización a lo largo de las últimas tres décadas, en los que los bancos centrales del Grupo de los 10, excluido Japón, han tendido a recortar los tipos en un promedio de 320 puntos básicos durante un periodo de 15 meses.
"Creemos que vamos a tener un ciclo de disminución de tasas normal. Todos los bancos centrales, excepto Japón, adoptarán una flexibilización mucho mayor de lo que los mercados están descontando", matizan.
Desde la firma suiza también señalan que, a pesar del ciclo de subidas de tipos más agresivo desde la década de 1980, el PIB real se expandió un 2,9% durante 2023 hasta finales del tercer trimestre. Sin embargo, los rendimientos han subido y los mercados bursátiles se han visto presionados desde la reunión del FOMC de septiembre.
Por ello, creen que esto ha renovado las preocupaciones sobre el crecimiento y muestra que la economía "aún no está fuera de peligro".
"La expansión soporta el peso creciente de los tipos de interés más altas. Los estándares de crédito y préstamos parecen estar endureciéndose más allá de la simple revalorización. Los ingresos del mercado laboral siguen revisándose a la baja, en términos netos, a lo largo del tiempo", dicen Kapteyn y Baweja.
Asimismo, añaden que "de acuerdo con nuestras estimaciones, el gasto en la economía parece elevado en relación con el ingreso, impulsado por el estímulo fiscal y mantenido en ese nivel por el exceso de ahorro".
El banco prevé que la presión al alza sobre el crecimiento del impulso fiscal en 2023 se desvanecerá el próximo año, mientras que el ahorro de los hogares se está "adelgazando" y los balances parecen menos sólidos.
"Además, si la economía no se desacelera sustancialmente, dudamos que el FOMC restablezca la estabilidad de precios. El año 2023 tuvo un rendimiento superior porque muchos de estos riesgos no se materializaron. Sin embargo, eso no significa que hayan sido eliminados", concluyen los analistas de UBS.