Retrasos en las vacunas y nuevas cepas: "El camino de la inmunidad se ha complicado"
"La inoculación masiva no llegará hasta finales de 2021"
Actualizado : 09:20
Cuando ya se ha cumplido un año de pandemia, contando desde el primer día del confinamiento de la ciudad china de Wuhan, las esperanzas de que las vacunas contra el Covid-19 permitan alcanzar la inmunidad de grupo a tiempo para que la economía mundial remonte con ganas en la segunda mitad de 2021 empiezan a adelgazar. Los retrasos en la producción, distribución y campañas de vacunación proyectan una sombra de preocupación en los analistas, que ya avisan de que las restricciones seguirán siendo la tónica ante la cada vez mayor certeza de que la población no habrá recibido la protección contra el coronavirus antes del verano, pero seguramente tampoco después.
Noticia relacionada
Bruselas aconseja aislar sitios como España, con una incidencia superior a los 500 casosAdemás de todos los impedimentos que están hallando farmacéuticas y gobiernos ante la titánica tarea de inocular a la ciudadanía, “el camino hacia la inmunidad se ha complicado, ya que las mutaciones del virus suponen riesgos importantes para el calendario de vacunación”, escriben los expertos de Barclays. El mensaje tranquilizador que tratan de enviar desde las compañías sobre la efectividad ante las nuevas cepas o la facilidad de adaptar las candidatas, se ve empañado por las dificultades de producción de Pfizer o AstraZeneca que afectan a las entregas comprometidas con la Unión Europea (UE).
El ritmo de la vacunación, que se supone que liberará a los gobiernos de la necesidad de contener el virus a base de otras medidas, sigue siendo demasiado lento en las principales economías de la zona euro. “Francia está acelerando después un comienzo muy lento, pero eso es insuficiente para compensar la ralentización de España e Italia. Al ritmo actual de 250.000 vacunas al día, la inmunidad de rebaño en los cuatro países de la zona euro no se alcanzará hasta finales de 2021, como muy pronto”, pronostican los expertos de Pantheon Macroeconomics.
En contraste, Israel se ha convertido en el líder de la eficacia. Ya se ha vacunado a una cuarta parte de su población y el gobierno tiene como objetivo alcanzar el 100% a finales de marzo. “El intercambio de datos entre Pfizer y la OMS debería aportar pronto mucha más claridad sobre la mejor estrategia a seguir”, apuntan los expertos de Edmond de Rothschild.
Por el momento, la única vía posible para los Veintisiete es seguir aplicando las mismas medidas que hasta ahora: contención del virus a la brava a base de encerrar a la población y parar la actividad, por la evidencia de que la situación todavía no es tan mala como en marzo, pero casi. En este sentido, la Comisión Europea ha recomendado este lunes a los países miembros no viajar desde ni hacia regiones de alto riesgo de expansión del coronavirus. El organismo aconseja aislar los territorios con una incidencia acumulada superior a los 500 positivos por cada 100.000 habitantes. Es el caso de España.
Los mercados empiezan a ponerse nerviosos al empeorar la situación sanitaria especialmente en Francia. Varios países ya han metido la directa, como Alemania o Noruega, y han introducido confinamientos más estrictos. El Gobierno de Emmanuel Macron también se plantea tomar medidas adicionales ante la propagación de nuevas cepas de la Covid-19 y en España, el Ejecutivo de Pedro Sánchez se resiste a endurecer su actuación, pese a que los gobiernos de las Comunidades Autónomas se lo imploran.
Sin negar la efectividad para la contención de los contagios de volver a aplicar la misma receta que el año pasado, los expertos ponen el acento en la profunda huella que dejará en la economía. Tras el impresionante repunte del tercer trimestre de 2020, "la economía se enfrenta ahora a una recuperación en forma de L, ya que los sectores de servicios más sensibles a los virus -que representan entre el 10 y el 15% de la economía, no consiguen despegar, a la luz de los PMI de la semana pasada", exponen desde Pantheon Macroeconomics. Las cifras del sector de la hostelería de la hostelería cuentan su propia historia. A partir de septiembre la producción del transporte aéreo -que incluye el tráfico de pasajeros- seguía siendo inferior en un 67% a los niveles anteriores al virus. En cuanto al déficit correspondiente en alojamiento y restaurantes y cafés era del 42% y el 21%, respectivamente.
“Una rápida normalización de estos datos proporcionará un gran impulso a corto plazo para el PIB una vez que la economía se reabra por completo, pero eso no ocurrirá pronto”, lamentan estos economistas. “Incluso si asumimos un confinamiento duro durante el primer trimestre, no es seguro que las cifras sean lo suficientemente bajas como para permitir una reapertura en el segundo trimestre”, prosiguen. “Todavía esperamos que una reapertura sea posible de abril a junio, pero la idea de que la economía estará en vías de recuperación a partir de abril, que hasta hace poco era la opinión de consenso, ha desaparecido”, rematan los economistas.