Reino Unido estrena el año en la picota: la tensión en los bonos rememora la crisis de Liz Truss
Los expertos subrayan el hecho de que los rendimientos estén subiendo también en EEUU
Actualizado : 10:37
El rendimiento del bono (gilt) a 10 años de Reino Unido alcanzó este miércoles su nivel más alto desde 2008 (después de que el rendimiento a 30 años llegara a su punto más alto desde 1998 a principios de esta semana, en el 5,22%) durante una venta masiva agresiva de bonos, y superó los niveles máximos registrados durante la crisis del "mini presupuesto" histórico de Liz Truss y nuevamente durante el período de verano/otoño de 2023, debido a la política monetaria más estricta del Banco de Inglaterra (BoE) y las crecientes preocupaciones fiscales.
"Hoy, los demonios de Reino Unido han vuelto, impulsados por preocupaciones fiscales intensificadas, evocando recuerdos de los caóticos días del 'mini presupuesto' de Liz Truss", escribe Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank. "En ese entonces, los mercados perdieron confianza en los planes de gasto del Gobierno, lo que provocó una venta masiva agresiva que obligó al BoE a intervenir. Las repercusiones derribaron al Gobierno de Truss, allanando el camino para la fuerte victoria electoral del Partido Laborista", recuerda la experta.
"Los demonios de Reino Unido han vuelto, impulsados por preocupaciones fiscales intensificadas"
Ahora, el recién elegido Gobierno laborista, que prometió rescatar al país, mejorar las finanzas y estimular el crecimiento, enfrenta su propio juicio, continúa Ozkardeskaya.
"Para cumplir con sus ambiciones, necesita el apoyo del mercado, un recurso que resulta esquivo. Sin él, los costes de endeudamiento se dispararán, forzando decisiones más difíciles: más impuestos, menos gasto y un crecimiento más débil. Y nada de esto augura un buen panorama para la libra esterlina".
La libra esterlina ha caído por debajo de 1,23, su nivel más bajo en más de un año, frente a un dólar estadounidense especialmente fuerte por la subida de los rendimientos de los bonos americanos. El 10 años alcanzó niveles máximos desde abril. Sin embargo, la libra también se vendió agresivamente frente al euro. "Es hora de salir de las posiciones largas en libras esterlinas y esperar a que el polvo se asiente", aconseja la experta de Swissquote Bank.
En el frente de las acciones, el Ftse 100 se recuperó en la pasada sesión de las pérdidas iniciales (cerró con leves alzas del 0,07%), ya que una libra más débil respalda a las empresas del índice que generan la mayor parte de sus ingresos fuera de Reino Unido, mientras que las acciones británicas más pequeñas son más vulnerables a la incertidumbre política y al rápido aumento de los rendimientos.
"La reacción del mercado refleja la condena a las políticas del Partido Laborista, y sugiere una falta de confianza en su capacidad"
En este sentido, desde IG hacen hincapié en la presión que ejerció ayer en las empresas de mediana capitalización el rendimiento creciente de los bonos, con caídas del Ftse 250 hasta mínimos de cinco meses.
"El ambiente en torno a Reino Unido sigue deteriorándose, ya que los rendimientos de los bonos a 30 años alcanzan su nivel más alto en más de un cuarto de siglo. Los inversores han regresado del receso festivo con un estado de ánimo negativo respecto a Reino Unido y ahora han decidido que el estatus barato del país no es un atractivo, sino más bien un reflejo de la difícil situación que enfrenta la economía británica. La actitud cautelosa es evidente en los mercados, pero parece ser Reino Unido quien está soportando la peor parte”, indican en IG.
Laith Khalaf, jefe de análisis de inversiones en AJ Bell, comenta que es curioso que los rendimientos de los bonos hayan alcanzado nuevos máximos tanto tiempo después de que las tasas de interés alcanzaran su punto máximo, "lo que sugiere que los mercados fueron complacientes respecto a la inflación y demasiado confiados en que el Banco de Inglaterra recortaría las tasas drásticamente".
"Rachel Reeves (ministra de Economía) parece ser una de las posibles culpables del aumento de los rendimientos de los bonos, lo cual probablemente sea una afirmación exagerada. El primer presupuesto de Reeves fue ligeramente inflacionario y aumentó el endeudamiento general del Gobierno, pero desde principios de octubre, los rendimientos de los bonos a 10 años en EEUU y Reino Unido han subido casi a la par", explica el estratega. "Aquellos que piensan que las recientes inquietudes en el mercado de bonos se deben a las políticas anunciadas en el presupuesto deben explicar por qué ha habido una correlación tan fuerte en el aumento de los rendimientos de los bonos tanto aquí como en EEUU", añade.
"En un corto período de tiempo, la economía de Reino Unido ha pasado de crecer a un ritmo decente a desacelerarse drásticamente"
"No hay respuestas fáciles a la pregunta de por qué se mueven los mercados, especialmente en marcos de tiempo cortos, y a veces simplemente se trata de impulso. Sin embargo, el hecho de que los rendimientos estén subiendo a ambos lados del Atlántico sugiere que el nuevo año ha traído consigo un enfoque en el próximo presidente de EEUU y el potencial de que sus políticas comerciales y de inmigración sean inflacionarias, lo que tiene implicaciones para ambas economías. Los inversores en bonos también podrían estar mirando los enormes montones de deuda gubernamental ya registrados a ambos lados del Atlántico y diciendo: gracias, pero no, gracias".
Kathleen Brooks, directora de análisis de XTB, se muestra más crítica con el Gobierno laborista y afirma que su retórica "es una de las razones por las que estamos en este lío en primer lugar".
Se espera que Reeves dé un discurso en los próximos días, donde podría centrarse en los recortes del gasto público en lugar de en más aumentos de impuestos para cumplir con sus reglas fiscales, dice la experta.
"No hay garantías de que Reeves pueda calmar al mercado. La reacción del mercado refleja la condena a las políticas del Partido Laborista hasta ahora, y sugiere una falta de confianza en su capacidad para impulsar el crecimiento económico en Reino Unido. En un corto período de tiempo, la economía de Reino Unido ha pasado de crecer a un ritmo decente a desacelerarse drásticamente, lo que está causando inestabilidad en el mercado de bonos".
Aunque Brooks reconoce que las declaraciones de Trump han causado también ansiedad esta semana, cree que el aumento de la rentabilidad de los bonos británicos se debe también a factores internos.
"Reeves navega en aguas fiscales complicadas y sus planes para poner a Reino Unido en una posición fiscal segura están hechos trizas. Su limitado espacio fiscal ya ha sido eliminado por el imparable aumento de los rendimientos de los bonos en los últimos meses y corre el riesgo de incumplir sus propias reglas fiscales".
"Aunque no estamos en un momento estilo Liz Truss (...), no cabe duda de que el mercado de gilts del Reino Unido está experimentando una crisis de confianza, lo que sigue a un agotamiento de la confianza empresarial y del consumidor", concluye Kathleen Brooks.